No sé cómo empezar contando esta historia porque siempre termino haciéndola un lío como todas las que he escrito por aquí y no sé si me entendéis bien.
De esto ya hace dos años pero no sé a quién contárselo. El tío de mi novio es una persona muy extrovertida, muy gracioso, siempre está mareando a los demás para hacer gracia… Podéis imaginaros el tipo de persona que es.
Una noche de verano nos invitaron al campo ( estaba el, mis suegros y el resto de tíos de mi novio, 2 más) hicimos una cena y lo típico que si cerveza que sí vino luego el cubata… Yo iba fina pero no borracha porque nunca llego a ese punto de arrastre siempre controlo y paro. Y él esa noche como el resto de noches que hemos coincidido era el que se encargaba de llenarme el vaso para que no me faltara alcohol.
Hasta ahí todo bien.
Lo malo viene ahora. Nos salimos afuera donde están los coches a coger el tabaco que se me había olvidado, y el nos quiso acompañar hasta la puerta, pero cuando llegamos a la puerta ( yo iba con mi novio y con él) empezó a agarrarnos a los dos de los hombros solo que conmigo bajo hasta donde empieza la raja del culo, pero como es tan sobon ( así tiene la faceta ganada en la familia) no le di mayor importancia. Al llegar a la puerta mi novio se había dejado las llaves en la terraza por lo que tenía que volver a por ellas, y me dejó sola con él, no lo hizo a posta, nadie en su sano juicio se piensa que su tío va a hacer lo que hizo.
Pues bien, al irse mi novio que tardaría un minuto pero yo me quería morir empezó a mirarme con cara de baboso , de asqueroso salido, a decirme lo guapa que era y que estaba y seguidamente me abrazó fuerte ( supongo que para notar mis tetas) me tocó el culo me dio una palmetada y empezó a darme besos en la mejilla y quería que yo también le devolviese los besos, me quedé en shock, tenía entre ganas de chillar llorar y matarlo, pero estaban todos los familiares de mi pareja y como él es tan «sobon» quien me iba a creer ?
Al salir fuera me derrumbe y se lo conté a mi pareja, él quería entrar y dejarlo empotrado contra la pared pero yo no quise que hiciera nada porque no quería problemas con la familia .
Mi novio lo odia y no puede verlo, yo recuerdo la escena más veces de las que pensaba que recordaría y verlo me produce angustia .
Son una familia muy unida y cuando quedan, quedan todos . Yo le digo a mi novio de ir pero él no quiere porque no puede mirarlo a la cara .
Y las veces que hemos coincidido el sigue mareandome como si nada y sigue ofreciéndome alcohol para que no me falte, cosa que yo ya no acepto , no porque no quiera beber, sino porque no quiero nada que venga de él.
No sé si me habré explicado bien pero necesitaba contarlo porque esto nadie más lo sabe y cada vez que ese pensamiento viene a mi cabeza me hace sentir muy mal.
Ese día en especial lo recordaré como si fuera ayer . Lloré, me sentí sucia y rechace a mi novio porque me daba asco todo. Solo quería ducharme una y otra vez pero la suciedad emocional no te la quita nadie.
Quizá penséis que no fue para tanto, pero jamás pensé que viviría una situación así y aunque no llegó a pasar nada más fuerte se aprovechó de que yo estuviera sola y «contenta» para hacer todo lo que hizo porque en un minuto no le daba más tiempo.