Cambia de terapeuta, está claro que no conectáis.
Yo estuve yendo a uno con el que me sucedió algo parecido. A mi de pequeña me encantaba el cole (me gustaba mucho aprender, y me sigue gustando, siempre ando aprendiendo cosas nuevas). Pues él venga a decirme que era imposible, que a ningún niño le gusta el cole, que solo era mi necesidad de aprobación. Y de verdad que no (en otros aspectos de mi vida no digo que no, pero en ese en concreto no era así). Pues empeñado en convertir mi placer en un trauma. Además de empezar a crearme inseguridades que no tenía, entre otras cosas.
Spoiler: no terminó bien.
Por eso te recomiendo que busques otro cuya metodología se adapte más a ti y te haga sentir más cómoda, si no no vas a conseguir avanzar. Eso no significa que sea mal terapeuta, solo que no es el adecuado para ti.
Yo he trabajado bastantes años en terapia física, y al final es lo mismo, dar con las manos que a ti te van bien.
¡Ánimo!