La situación es muy delicada, rozando al divorcio diría yo.
Tenemos una bebé. Siempre que salíamos a la calle, la gente se pensaba que era un niño, estaba ya cansada de repetir que era una niña. Le propuse a mi pareja ponerle pendientes, también en parte porque me gustaba.
Él se negó porque no quería que la bebé lo pasara mal.
Un día al pasar por una farmacia sin consultarle se los puse. Y cuando se enteró tuvimos una gran discusión, se enfadó bastante, tanto, que dijo que ésto era motivo de divorcio.
Desde entonces nuestra relación ha cambiado, y me arrepiento mucho por lo que hice.
¿Cómo puedo volver a ganarme su confianza?