Era un día cachondo como cualquiera, ya con la ropa en el suelo y con las ganas de sudar todo el amor que nos teníamos. Todo iba de maravilla, nada que nos arruinara el juego, hasta que se acerco a mis pechos, y antes de comerlas, como «buen cristiano» que es el muchacho se le ocurrió decir unas palabras antes de echarselas a la boca,
«El bebé quiere su lechita»
Y desde ese momento mi «hornides» se fue corriendo horrorizado pero yo seguia ahi, incomoda, pero no podia huir asi que segui hasta que estuviera satisfecho el «bebecito».
Tal comentario me hizo pensar que era su mamá a la que estaba follando (y peor por que en ese tiempo yo traia un corte de pelo similar al de ella).
Hasta me paso por la mente ese episodio de AHS donde el asesino contrata a una prostituta solo para chuparle la chichi por que su mamá nunca lo amo.
Y es que no honey lo siento pero no, es que imaginarme un bebé con el paquete todo peludo chupandome la chichi no se me hace para nada sexy, en cambio me un terror que ay dios mio nooooo!! Tampoco que me digas «mamita» pues siento que en vez de chupartela entera tengo que tomarte de la mano y acompañarte al colegio.
Aunque se que hay chicas que les gusta que les llamen asi y todo, y no le veo el mal pero es que simplemente yo no puedo, me quita la inspiración cuando se refieren a mi de tal manera.