He estado años en una relación de maltrato. Nadie lo sabe ni nadie lo ve. Yo no soy capaz de hablar y él se ha encargado de decir lo justo y necesario para tener el papel de pobrecito y que ahora necesita vivir la vida a tope porque yo se la he jodido los últimos años. Ahora él tiene el papel de hombre, por fin, libre y que merece todo lo bueno del mundo que me da náuseas ver.
Aunque me ha dejado infinidad de veces, hace mes y una semana fue la última. En todas me volvía y hasta una semana antes de dejarlo definitivamente, me decía que me quería aunque no igual que el principio, que no quería cortar y que siempre me vuelve a hablar porque se preocupa y me echa de menos. Tras esta, ha puesto excusas para buscarme y luego decirme cosas muy desagradables como que no me quiere, no me echa nada de menos, no me merezco su respeto y que asuma que he perdido a un tesoro de persona.
Otras veces me ha dicho lo de que se sentía mejor sin mí y rápidamente se ha arrepentido. También que ya le ha dicho a su entorno las cosas y supongo que habrá visto que jugando el papel de víctima por fin se ha rodeado de gente y tiene atención, que le merece más la pena que mi atención, y por eso no vuelve.
He cortado el contacto con él. He cerrado todas las cuentas que teníamos en común porque con eso al final me enteraba de cosas que no quería enterarme y he visto que está haciendo cosas que jamás quiso hacer conmigo o que me pidió, me hizo gastarme el dinero y de últimas me rechazó. Que está haciendo todo aquello que me obligaba a hacer porque él no era capaz de hacerlo solo. Lo cerré todo, no quiero saber nada. He quitado sus cosas de mi habitación, he borrado la conversación, no tengo nada.
Estoy decaída por el sentimiento de soledad y de haber perdido años de mi vida, sentirme un poco perdida pero no lo echo de menos. Sin embargo, hay algo que me duele tantísimo que no sé llevarlo y a pesar del poco más de un mes que llevamos separados, todavía me echo a llorar cada día y es un llanto que no puedo controlar. Me rompe al momento. Y es recordar cómo me ha tratado.
Durante la relación le hacía capturas de pantalla o añadía en favoritas las burradas que me decía y de vez en cuando me salta alguna por la galería. También tengo la conversación con el 016 que no he borrado y es de varios días. Tengo apuntados todo lo que me dijeron. Si me aparece alguna foto de su cara o encuentro algo suyo por mi cuarto, automáticamente recuerdo algo malo que me dijo o hizo ese día. Recuerdo los gritos y sobretodo el miedo que sentía. Es que estoy escribiendo esto y me acabo de echar a llorar porque no lo puedo controlar.
Leo algunos mensajes y lo revivo todo. Es demasiado fuerte y no me atrevo a decírselo ni enseñárselo a nadie. Aunque a veces me dan ganas de imprimirlos y que todo el mundo vea quién es. Terroríficos, creo que ni él mismo es consciente de los ataques de ira que tiene y lo que llega a decir y yo enterré gran parte de todo lo que me ha dicho, aunque realmente no lo olvidaba, lo transformé en ansiedad y miedo. Otras cosas sí se quedaban rebotando en mi cabeza.
Las últimas veces que me ha hablado sin estar juntos me decía que adelante si quiero jugar el papel de novia que era perfecta y que él sea el malo, le da igual porque tiene la conciencia tranquila y solo soy una despechada. Y que todo es culpa mía, las palabras «es culpa tuya» es lo que más he leído. Saca a relucir un momento horrible en el que él estaba como loco, que pensaba que me mataba, y dice que hay que ver lo mal que se lo hice pasar y que nunca lo olvidará. Realmente yo no hice nada, él empezó a meterse conmigo y cuando me vio afectada, explotó más y se cargó de ira. La culpa? Mía, por no ponerle las cosas fáciles. Quiero decir, que cuando él explota de la forma más descomunal posible, que es siempre, la culpa encima es mía y soy yo la mala que lo ha llevado a sentir así.
Siento mucha rabia con esto, chicas. No paro de acordarme continuamente de todo lo que me ha dicho y me da una rabia, unas ganas de volver al pasado para pegarle con una sartén en la cabeza y sacarme de allí.
Estoy distraída haciendo cualquier cosa y se me viene a la mente. Revivo el miedo una y otra y otra vez y se junta también con cierto asco al ver cómo va de víctima y a la vez de creerse superior. Cómo quiere convencerme de haberme portado mal cuando, de verdad, he sido una marioneta, un juguete de trapo. Ayer tuve una entrevista de trabajo muy buena y en los últimos cinco minutos, me tuve que contener las lágrimas porque esa sensación de pánico se me atravesó por la cabeza.
A veces me gustaría tener a alguien a quien poder enseñarle esas capturas de las conversaciones y que me diga qué opina, pero me da pánico enseñarlas en mi círculo cercano. No soy capaz de hablar ni ver a nadie y me siento sucia.
Aunque no lo dejaba porque estaba hundida, tenía claro de últimas que necesitaba que esto parase. Lo que no me esperaba es que al acabarse, iba a sentir tanto miedo y no ser capaz de salir de este bucle.
Esta persona debería estar en la cárcel, de verdad, o desaparecida del mapa. No quiero que se muera pero tampoco que exista.
Con el tiempo que ha pasado, pensaba que me sentiría libre y no, me siento totalmente enjaulada y cada vez peor.
¿Cómo habéis salido de aquí? ¿Cómo se supera? ¿Cómo se vuelve a confiar en la gente, y no digo ya en una pareja, si no en cualquier persona en general? ¿Cómo se vive?