Hola! Os cuento estoy porque ando flipando bastante con el tema la verdad. A ver si alguien puede entender al mundo, porque telita…
Este verano me prometí, todo muy bonito, pedida en la playa al anochecer, pétalos en la cama y bla bla bla. Volvemos de las vacaciones, lo contamos a familia y amigos y empezamos a planear la boda. Ya hemos elegido fecha, un sábado de septiembre, y estamos organizando el papeleo. El otro día, hablando con mi abuela de cómo van los preparativos, se lo contamos y nos espeta: bueno, a ver, que esos papeles no interesan a nadie, lo importante es la iglesia, que es lo que realmente vale a los ojos de dios. Yo, muy educadamente, le respondo que lo hemos hablado y que por tema económico, entre otros (no somos creyentes), no vamos a casarnos por la iglesia sino por el ayuntamiento. Empezó a gritar muy alterada que eso era pecado, que esa boda era de mentira, no se cuantas sandeces más y que así no podía ir de blanco. Yo que estaba flipando con la situación le dije que no me iba a casar de blanco, que había encontrado un vestidito muy mono azul celeste, y que me queda como un guante. Se empezó a poner pálida y a llorar, que menudo disgusto, que soy la vergüenza de la familia, que qué es eso de no ir de blanco, que todo el mundo va a saber que soy una facilona por no ir de blanco… un show que aún no me lo creo.
Al día siguiente, comimos con mis suegros, y les contamos la situación con mi abuela. Ay amigas, cuando llega el momento de decir que no voy de blanco. Mi abuela se quedó corta. Aquí eran 5 personas gritando lo mismo (mis suegros, cuñados y la abuela). Yo os juro que no sabía dónde meterme, y mi chico intentado que entraran en razón, que es un puto vestido y que no pasa nada por no ir de blanco. Total, que nos levantamos y pasamos de la sobremesa, porque viendo el percal… Llegamos a casa, nos tiramos en el sofá a ver la tele. Llamada de mi tía. Que le ha contado mi abuela que soy una fulana que no va a vestirse de blanco. Que si me parece normal casarme así, que tengo que ir de blanco. Al final me harté y colgué y me fui a ver a mi madre y hermana. Se lo cuento, y al menos ellas no me gritaron, sólo pusieron cara de oler a mierda. ¿Estás segura que no quieres ir de blanco? Que luego ves las fotos de la boda y no te gustan. Pues no señoras, no me gustarán si voy disfrazada de blanco. Si voy con mi maravilloso vestido azul me van a encantar.
Así que me estoy planteando decirle a mi futuro marido que si nos casamos en la playa lejos de gilipollas miradas indiscretas con mi puñetero vestido azul y mandamos las invitaciones para que la gente vaya a una iglesia donde haya un cartel mío a tamaño real vestido con un maravilloso y pomposo vestido blanco, para que la gente se quede contesta y deje de dar por el orto.
Por suerte hay alguno que se salva, que he contado la situación y me han respondido: vete como quieras que para algo es tu boda, a mi con que me pongas tarta… Supongo que a esos les invitaremos a la boda en la playa.
P.D. sí, he recibido más llamadas de la gente, todos histéricos porque no voy a ir de blanco. Eso sí, a mi chico, que ha dicho que va a ir vestido con un traje de súper mario le han dicho que es muy original :)