A ver amigaaaaaaaaas porque no he pasado mas vergüenza en mi vida.

Resulta que cuando empezó la cuarentena acababa de hablar con mi follamigo y me había apuntado su telefono nuevo. Llevamos así como tres meses quedando para darnos amorcito y como esto de la reclusión se veía venir pues dijo que me daba su número personal para lo que necesitara (normalmente hablábamos por el de la empresa).

Pues el otro día por la noche estoy yo en la cama aburridilla y me pongo a pensar en él y a ponerme como una moto. Como nunca nos habíamos enviado mensajes cochinotes pues decido que ese va a ser el día. Guardé su teléfono y le mando el primer mensaje que lo mismo tendría que haberlo pensado mejor porque lo único que le puse fue que si le apetecía pasarlo bien.

Que no os voy a contar toda la conversación proque ya os la podéis imaginar pero el caso es que hubo guarrindongadas y alguna que otra foto tetas. Yo ya estaba muy arriba cuando dice que me va a enviar una foto pene y le digo que adelante.

Pues cuando la abro aquella no era una polla conocida. La polla de mi follamigo es delgada y larguirucha y aquello era más como el martillo de Thor. Pero en el momento pensé que se estaba quedando conmigo y le dije q me mandara una de verdad, y me manda otra desde otra perspectiva pero también de una polla gorda y más bien cortita.

Ahí ya empecé a dudar y se me dio por preguntarle su nombre y va el tío y me dice que se llama Eduardo que no es el nombre de mi follamigo ni de coña. El tío además no se corta y me dice de donde es y todo y hasta me propuso q nos viéramos que le estaba alegrando la cuarentena.

Resultó que al grabar el número cambié dos números y estuve haciendo sexting con un puto desconocido, al que además envié fotos de mis tetas. Mucho cuidado chicas cuando hagáis sexting y fijaros bien a quien le escribís.

Un abrazo y gracias por leer