Empecé a seguir a WeLoverSize porque llegó un momento en mi vida en el que me necesité y tuve que quererme, y necesité empoderarme a través de mi cuerpo. Las conocí gracias a una amiga, que me recomendó su página de la única red social que utilizo. Como mi empoderamiento ha sido bastante intermitente (con subidas y bajadas, más o menos inseguridades) hubo temporadas que las tenía más apartadas de mi vida y casi ni las leía (cuando estaba en lo más profundo del abismo y no me dejaba ayudar). He de decir que realmente soy muy fan de su trabajo y muchas cosas de las que he leído a través suya me han hecho aprender mucho (me encanta aprender!) (sí, también soy un poco friki), y estoy segura de que lo seguirán haciendo.

Total, que hace poco que he empezado a leerlas de nuevo bastante a menudo.

Y muchas de las cosas que estoy leyendo últimamente me perturban, me asustan, me dan pánico, me hacen pensar que todo el esfuerzo invertido por muchas personas que trabajamos (o al menos lo intentamos) en el ámbito de la diversidad y la deconstrucción de estereotipos (desde diferentes disciplinas y aplicado a diferentes ámbitos de la vida) tiene un mínimo impacto: chicas/mujeres a las que les da miedo o vergüenza penetrar a su pareja chico/hombre (pareja hetero y cisgénero*), prácticas sexuales consensuadas en el ámbito privado que son criminalizadas (sí, va por el tema BDSM), en fin…multitud de comentarios discriminatorios hacia personas cuyas prácticas, experiencias o actitudes en su ámbito privado nos parecen incorrectas, me atrevería a decir horripilantes (OMG).
Llegadas a este punto, me gustaría recordar una única palabra (bueno, dos): S O R O R I D A D y D E C O N S T R U C C I O N. Esa gran palabra que define la hermandad entre mujeres (que bien suena, sororidad y que poquito se practica). De hecho este concepto tan extraordinario también puede aplicarse a las personas que en los comentarios del foro y los posts expresan cosas como “yo eso no me lo creo” “a mentir a tu casa” (para escribir this shit, mejor no escribir nada) ¿No os dais cuenta de que justamente ese comentario está cargado de prejuicios? ¿Por qué no hay apoyo en un espacio creado precisamente para servir de apoyo?

¡Aprendamos a ser asertivas!

Mujeres, por favor, repensaos a vosotras mismas, ¡hago un llamamiento a la deconstrucción! ¡Al derribo de estereotipos y prejuicios! Pero por favor….¿en serio estamos en este punto? ¿En serio hace falta recordar que las mujeres pueden (y deben) ser empotradoras y penetradoras de sus parejas sexuales para disfrutar al máximo del sexo, sin tabúes? ¿Qué las prácticas sexuales consensuadas en el ámbito privado (sean las que sean) no deben ser criminalizadas? ¿Por qué cuesta tanto repensarnos y deconstruirnos?
Me duele ver como muchas mujeres se atacan unas a otras bajo un velo de “sinceridad” y anonimato. No amiga, eso no es sinceridad, eso ya raya el punto de ser irrespetuosa y puedes hacer sentir mal a la otra persona. Puedes hacerle sentir exactamente la misma mierda que le hacen sentir las experiencias que con tanta confianza hacia sus compañeras mujeres relatan en los foros esperando que las comprendan y sobre todo, no volver a sentirse juzgadas. Ojalá un planeta lleno a rebosar de SORORIDAD Y DECONSTRUCCIÓN.

Quanto mais unides* somos, mais força temos, mais livre seremos (frase vista en fotografía publicada en el Instagram de WeLoverSize el 15 de agosto de 2018)
La letra e se utiliza para expresar género neutro, ni masculino, ni femenino, pretendiendo incluir en ese adjetivo a todas las identidades de género existentes: mujeres, hombres, personas no binarias, personas agénero, personas de género fluido, etc.

* CISGÉNERO: Personas cuya identidad de género asignada al nacer (en función de su genitalidad) se corresponde con la identidad de género autopercibida, es decir, las personas que no son trans, son cisgénero.