Estamos cansadas de que, cuando expresamos en voz alta que nos encontramos mal con nosotras mismas, lo único que nos digan sea: «¡Pero si eres preciosa, sube esa autoestima!» o nos manden un sticker con alguna frase Mr. Wonderful.
¡Pues no, querida, no se me va a subir la autoestima por arte de magia por mucho que tú me lo digas! Que aprecio la intención, pero cari, ¡por lo menos dame algún consejo!
Así que, para todas aquellas que necesitéis un empujoncito para brillar con vuestra maravillosa luz, aquí os dejo 10 ejercicios sencillos que os pueden funcionar (a mi, por lo menos, me ayudan):
- Lista de pros y contras
Esto puede sonar a la mítica lista para salir de dudas sobre qué escoger en el super, sobre todo si sois Libra como yo, pero en efecto, ¡el trasfondo es el mismo! Simplemente debeis coger un sitio donde escribir, algo con lo que pintar y poneros manos a la obra. Haced dos columnas: una de cosas buenas, y otra de cosas malas. Por cada cosa mala que pongáis, tenéis que poner las dos cosas buenas que antes se os vengan a la cabeza sobre vosotras mismas. Y, conociéndonos, sólo hay una condición: no puedes poner otra cosa mala hasta que no hayas encontrado esas dos buenas asociadas. ¡No valen las trampas!
- La quema de defectos
Bienvenidas a Salem, ¡porque vamos a quemar cosas! A ser posible evitad las cortinas, gatos y demás objetos o animales inflamables de la casa, y tened un extintor a mano por si acaso (o a un bombero), porque este ejercicio consiste en escribir en distintos trocitos de papel todos los defectos que se os ocurran e ir quemándolos uno a uno. También es aplicable a cosas malas que os hayan dicho y que os afecten, ¡aunque no a ningún ex! De momento no queremos ser acusadas de asesinato. De momento.
- ¡Más listas! (Como se nota que soy Libra)
A riesgo de que me consideréis la niña de papel, o asesina de árboles, os incluyo un último ejercicio que incluye papel (preferentemente, si no, siempre podéis escribirlo en un ordenador o en una pared, siempre que no os pillen). Este consiste en llenar toda una carilla de un folio, en distintos tamaños, orientaciones y letras, con todas aquellas cosas buenas que os hayan dicho o que hayáis pensado de vosotras mismas, así como todo lo que haga referencia a cosas que hayáis hecho y de las que estéis orgullosas. ¡Después podéis pegarlas en un sitio visible para poder verlo cada día y subiros el ánimo llenándoos la memoria de recuerdos bonitos!
- El juego de los post-it
Sí, más manualidades. Aunque no lo parezca, terminé primaria hace bastante tiempo. Este ejercicio consiste en escribir los piropos que más os gusten en diferentes post-its e ir pegándolos por los sitios que más frecuentéis de vuestra casa (o dentro de vuestra propia habitación). En el espejo del baño, en la puerta de vuestro cuarto por ambos lados, en el mueble de la entrada o en el cabecero de vuestra cama. Si compartís casa con más gente igual os miran un poco raro, ¡pero seguro que a ellxs también les da una alegría leer cosas bonitas!
- Hazte fotos con ropa que te haga sentir bien
En realidad esto es un pre – ejercicio para lograr lo que a muchas nos parece imposible: hacernos fotos en ropa interior y/o desnudas sin sentirnos horribles o bajarnos incluso más el autoestima. ¡No es imposible, lo juro! Comenzad con fotos completamente vestidas, encontrad una postura en la que os veáis bien ¡y sacaros unas cuantas fotos! Muchas veces ayuda el hecho de verse bien desde fuera.
- ¡Ponte en movimiento!
Lo dicen los científicos y no es por gusto, ¡el movimiento nos hace felices! Al liberar endorfinas nos sentimos mejor con nosotras mismas, así que prueba a bailar o a hacer ejercicio.
- Míticas frases en el espejo
El mítico ejercicio de decirle cosas bonitas a tu reflejo en el espejo. A mi me funcionó en una época concreta, ¡siempre puedes animarte a probar!
- Recréate en tus dones
Quizás suene un poco egocéntrico, pero cuando estés mal, intenta centrarte en aquellas cosas que se te dan bien, para distraer a tu mente de los pensamientos intrusivos. Nunca es fácil salir del agujero una vez entras, pero siempre será más llevadero con algo que te ayude a canalizar las malas vibras.
- Razona qué te hace sentir mal
Muchas veces lo que nos hace sentir mal es inconsciente, intuitivo y casi que ni siquiera somos capaces de expresarlo con palabras. Pues precisamente uno de los ejercicios que os traigo es eso, escribir, intentando racionalizarlas, todas las cosas que os hacen sentir mal y por qué. Quizás este ejercicio no os dará un subidón de energía y positivismo, pero puede ayudar a calmar esas cabecitas y dejarlas un poco más relajadas.
- Challenge famoso
Si lo que te hace sentir mal es tu cuerpo, o algo malo que te dijeron, hay un challenge que se hizo famoso hace un tiempo. Consiste en hacer un recopilatorio de las cosas malas que alguna vez te dijeron, o que alguna vez pensaste, y escribirlas en tu propio cuerpo sobre aquellas partes a las que hacen referencia (o en general por el cuerpo si son cosas abstractas), y luego sacarte una foto. Este todavía no lo he probado personalmente, ¡pero si queréis podéis dejar vuestra experiencia en los comentarios!
