Yo como tantas otras he sucumbido a estas webs de contacto que se supone que son para encontrar el amor, pero la mayor parte de las veces no. Porque todos sabemos que en Badoo, Tinder, Lovoo se puede encontrar el amor, pero lo más probable es que la mayor parte de la gente busque únicamente mojar el churro.

Pues he de decirles que tras años de arduo trabajo de investigación sociológica y diversión a partes casi iguales, he llegado a la conclusión de que Badoo y otras redes de contactos están plagadas de unos especímenes cuanto mínimo entrañables y muy reseñables. Aquí va mi top 6 de maromos a ver si estáis de acuerdo:

  1. “El Fotopollas”:  es el típico chaval iluminado que sin venir a cuento te manda una foto de su miembro, a veces erecto, a veces flácido… Nadie sabe muy bien por qué, tú no se lo has pedido, pero ahí está él, disfrutando de su exhibicionismo. Estos chavales, yo creo que ni esperan una respuesta, solo les gusta enseñar la berenjena, como si se tratara de un bebé en etapa fálica. En resumen, un hombre realmente encantador y que muchas veces te quita todas las ganas de reproducirte.

  1. “El Gastón”: a este lo he bautizado como al personaje de la Bella y la Bestia, no por lo guapo, sino por lo creído y por su piel finita. Os pongo en contexto. “El Gastón” es aparentemente un tío majo, habla, saca tema, te adula y cuando tú no le sigues el juego te insulta o te suelta el típico “pues tampoco eres tan guapa, GORDA”, o su primo hermano el “qué creída eres, simpática ja, eres una creída y blablabla...” Tendría mas detalles de este espécimen, pero es que ya en esta frase se ha ganado el block y no me he documentado más. 

 

  1. “El Exquisito”: es un chico que según él tiene las cosas muy claras y por eso exige. Pero exige siendo un poco faltón… te sonará de frases como “muy bonita, pero ¿si el mundo fuera ciego a quién le gustarías?, “menos presumir de culo y más de cerebro” y demás perlas. Su perfil viene acompañado de un currículum vitae y una lista de exigencias para contactar con él. Ojito con él, porque en un “plis plas” se convierte en un Gastón.

  1. El que busca sexo y no se preocupa de esconderlo: Así de primeras no parece un problema, a todos nos gusta el sexo y si fluye pues maravilloso. Pero lo que no veo yo normal es que de primeras, sin haber hablado te suelte cosas como “ufff que tetas” “¿te gusta hacer cubanas?”, “¿18 centímetros qué te parecen?”. Ya sabemos que estas redes no son precisamente sutiles o que en ellas el amor está jodido de encontrar, pero creo que deber haber un mínimo de respeto y de comunicación antes de este tipo de mensajes.
  1. “El Romeo”: a este lo conocemos todas, estoy segura. “El Romeo” es ese chico excesivamente amable, cariñoso, mimoso, interesado, etc. Su saludo predilecto “hola amor” o su hermano mellizo “Hola Princesa”. Todo bien con él, salvando las rápidas confianzas que se toma. El chaval es hasta majo, puede llegar a gustarte, se interesa por ti y tus cosas, lo malo es que suele estar haciendo “pesca de arrastre” en las redes. Quiere una relación y no dudará en hacer la pelota y coquetear con todas las que pueda a la vez para conseguirla. Un día está súper interesado en ti, en tu familia y amigos y al día siguiente está saliendo con otra. 

  1. “El Yo sé más que tú”: El problema con estos hombres es que se creen poseedores de la verdad, se creen que tienen más razón que nadie, que tú no sabes nada etc. Te van a dar la murga de manera extensa y cansina como pienses algo diferente a ellos. Son muy cansinos, son como cuñaos extremos. Si eres feminista, te caerá la chapa de que el feminismo es innecesario, que si las ayudas, que si las cuotas, que si pobres hombres… Una agonía.

 

Obviamente, doy mi opinión como chica hetero y no puedo hablar con conocimiento de causa de las mujeres que abundan en estas redes y que como los hombres tendrán sus taritas. Me encantaría conocer vuestras categorizaciones de nosotras, de hecho, podéis enviarlas a [email protected] y las admin las publicarán.

 

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