Si hay algo sobre lo que las mujeres hemos tenido curiosidad a lo largo de la vida y muuuucho desconocimiento ha sido sobre el tema de nuestro queridísimo himen. Esa pequeña parte de nuestra anatomía que tanto trajín se traía y tu no sabías muy bien por qué.

Recuerdo la primera vez que pregunté por el himen, tendría la tierna edad de 9 años y estaba con mi abuela en la cocina, las dos al lio pelando patatas a tope, y de repente le solté un “abuela ¿Qué es el himen?”, he de decir que mi abuela fue siempre muy progue para su edad (le habría encantando saber que su nieta termino siendo sexóloga jejej) el caso es que ella ni corta ni perezosa me soltó “hija mía, eso es la virginidad”.

Mi cara a esa tierna edad sin entender que me estaban contando

Si amigas mías, creo que a todas (o casi todas) cuando nos hablaron del himen nos contaron que era algo que se iba a romper el día que nos la metieran (oh cielos!). Claro a mi tierna edad no le quise dar mucha más importancia a este tema y hasta se me olvidó un poco, pero cuando vas creciendo la estela sobre el himen va creciendo.

Porque seamos claras, a ninguna nos han dado información clara, de calidad y veraz sobre esa parte de nuestra anatomía, por lo tanto aquí os traigo una serie de curiosidades que despejaran todas vuestras dudas.

  1. Existen muchas formas y tamaños: O qué pensabas reina, que todas tenemos distintos tamaños de ojos, brazos, labios, ¿y esto no iba a ser en cada una diferente?, pues si, existe tanta diversidad como mujeres hay.
  2. Su forma real: Es un tejido sumamente fino que se encuentra en el interior de la vagina, próxima a la entrada de esta, unos dos centímetros y tiene un color rosáceo. Por lo general además está perforado, ya que si no fuera así no permitiría salir el sangrado menstrual.

    Un ejemplo de distintos tipos
  3. No es para nada rígido: Muchas se piensan que es como una pared que tenemos ahí en medio que va a dificultar la entrada de absolutamente TODO en nuestra querida vagina. Muchas piensan que no se puede usar un tampón o la copa menstrual si no has tenido un primero coito (nada más lejos de la realidad)
  4. No desaparece por arte de magia después de tener penetración: Y este creo que es el mito más extendido. Siempre nos decían que un símbolo claro de la virginidad (es decir que no te han metido un pene por la vagina) era la presencia del himen, y una vez que esto pasaba ya desaparecía para siempre. Al ser como una membrana lo que hace es que se va estirando con las relaciones sexuales.
  5. Siempre hay que sangrar la primera vez: Otra gran mentira, si tienes un himen muy fino (y se calcula que más o menos el 50% de estos son así) no tiene por qué aparecer ningún tipo de sangrado. Si es cierto que hay mujeres que en sus primeras relaciones sangran más o menos, pero esto no tiene que suceder SIEMPRE. Por lo que las pruebas de “virginidad” son cuestionables.

    Algunas piensan que se sangra esto más o menos
  6. La primera vez siempre duele: Me vais a perdonar, pero esto sí que no. El hecho de estirar el himen no es un proceso doloroso, puedes notar como estira y una leve molestia, pero no un dolor infernal, hay chicas que ni se enteran. Existe una excepción de mujeres que lo tienen más rígido de lo normal y sienten molestias pero son las que menos.

Para las que diréis pues a mí me dolió la vida y esas cosas, aclarar que en las primeras relaciones como se hacen mal y con prisas, o simplemente se está tan nerviosa y tan tensa pasan varias cosas, la primera tu nivel de excitación y/o lubricación no es el optimo, y dos con la tensión y los nervios sin darte cuenta estás apretando los músculos del suelo pélvico y es casi imposible que no te duela si te intentan meter aunque sea un dedo.

  1. Existen mujeres que no tienen himen: Y esto es una realidad, no todas nacen con un himen visible o simplemente es tan fino que haciendo alguna actividad deportiva a podido desaparecer, por lo que si una mujer no presenta himen no quiere decir que haya tenido penetración si no que puede simplemente no haber nacido con el.
  2. No vuelve a aparecer: Hay muchas personas que se piensan que si no mantienes relaciones durante mucho tiempo, el himen puede regenerarse por arte de magia. Siento decirte que te puedes tirar 20 años sin relaciones que este no va a volver a aparecer.

 

Es muy importante conocer esta información y dejarnos de repetir entre nosotras y a los demás esas historias de antaño sobre esto, que solo trasmiten mitos falsos sobre la sexualidad. Creando angustias y miedos totalmente innecesarios, la próxima vez que oigas mitos falsos sobre el himen ¡ya sabes qué decir!

Aida Vallés Psicóloga especializada en Sexología y Terapia de Pareja

correo: [email protected] instagram:@aidavallesconsulta_