Hace algún tiempo tenía muchísimos amigos en mis redes sociales, se ve que tenía complejo de cazadora Pokémon e iba por la vida con mi Pokeball  en modo entrenadora.

Llegué a amasar la no desdeñable cifra de 3000 amigos, con la mayoría no tenía relación alguna. A algunos los conocía de vista, a otros en persona, con otros tenía aficiones comunes y con otros, la nada.  A éstos últimos los llamaremos LOS AMEBAS.

Los amebas son esa gente que te añade a cualquier sitio, pero no interactúa con nadie, todos los tenemos en grupos de whatsapp, en redes sociales o incluso y éste es el peor de los casos, en persona. Yo necesito interacción, no hace falta que sea continua, pero una charla, no hablo de 4 palabras sueltas, digo hablar, si me ganas el cerebro, tendrás mi lealtad por siempre. 

No hay cosa que me de más coraje que una ameba, me da la sensación de señora del visillo, que se entera de todo, que cotillea todo, que sabe todos vuestros secretos, pero ellos no comparten nada. Me recuerdan a mi vecina Julia, de cuando vivía en Barcelona, ( Yoda la tenga en su gloria) que era una mujer mayor que cuando alguien salía del portal te acechaba detrás de la persiana. Una vez quise regalarle un walkie talkie para que le comunicase a sus “compinches” todo lo que veía y sabía, pero no me atreví. Imaginaos la escena, una loca, cargada de niños (3, tampoco un saco), diciéndole que le regalaba un walkie. Esa mujer hablando en clave con Pepi que era la vecina del otro portal. 

 

            La pichona ha salido del nido con los polluelos, cambio y corto.

 

Me lo imagino y me pongo perrísima. Bueno que me voy por otros derroteros, el tema central era contaros como empecé a deshacerme de las amebas y bajar, de 3000 amigos a 74 y en breves algunos menos. Una vez me dijeron que solía contar mis historia como Las Virtudes, cada vez estoy más segura que es verdad. Bueno al lío.

Estaba yo un día viendo Netflix, y  me topé así de casualidad con Marie Kondo. Esa mujer me dejó impactada, ¡que poderío más grande! Quería ser Marie Kondo pero no sabía como hacerlo, la altura la tenía, me faltaba el pelo, el japonés,su dulzura y tonelada y media menos. Yo jamás podría ser una Marie patria, yo soy más Loles León, más de tocar los huevos. Me acababa de mudar y había hecho una gran limpieza, tenía pocas cosas a las que dar las gracias y luego despedirme, pero yo quería probar. Y se me encendió la bombilla de la maldad. 

 

Me senté con el ordenador en el regazo y comencé con la purga. Al principio sudaba que parecía Camacho, temblaba en modo chihuahua y me sentía fatal, como cuando te comes 12 croquetas, aún sabiendo que podrías con 14,  pero como de todo se sale, seguí eliminando. La segunda vez fueron meses más tarde, todo mucho más fácil, sin tanto drama. Ni rebequita de dramas ni ná, arremangada, con una coca cola en la mano y disfrutando el momento.

 

Ahora cada X meses hago una purga. Y lo anuncio. Se ha convertido en diversión. Me podría sentir mal por esto, pero de verdad que no lo hago. Bueno quizás un poco durante los primeros 3 minutos, pero luego se me pasa. Hago como Peter Pan, tengo un pensamiento alegre y a volar que son dos días. Sigo los consejos de Marie, ella es mi musa, es la que me inspira, antes de eliminarlos les hablo, les doy las gracias y los elimino. No con todos, no todos son importantes. Ni todos lo merecen.

Desde que hice mi propia versión del método de Marie Kondo, soy mucho más feliz, tengo mucha más estabilidad mental ( poca más, no nos engañemos) y mis días son mucho más alegres, espero los días de hacer MarieKondo de personas como si fuera Navidad. Soy mucho más feliz gracias a Marie. Ella me dio la clave para deshacerme de las amebas que abundan en mi vida, sin sentimiento de culpabilidad y anteponiendo lo que yo quería y sentía, a seguir aferrada a algo que no tenía sentido y no me llevaba a ninguna parte. Quiero gente de calidad en mi vida, aunque solo sea 1 persona. Los demás me sobran. ¿ Ha quedado lo suficiente anuncio de teletienda? Puede adquirir este método gratuitamente y ahora con la promoción 2×1 puede obtener el Marie Kondo portable para Whatsapp o apps de ligoteo. ¡¡Llama Ya!!

 

BI PÉREZ CÓRDOBA