Para empezar, gracias, muchas gracias por dejarme dar a conocer esta rara enfermedad, y aunque sigue en la sombra con muchos casos en hombres y mujeres. Vengo a hablar de la Hidrosadenitis supurativa.

A continuación os relato lo mas breve y detallado de mi historia:

-Con 12 años empezaron ha salirme pequeñas supuraciones en las ingles, a la que no di importancia pensándome que era por la depilación de mis zonas íntimas. Salieron en las axilas y seguí sin preocuparme. Se fue expandiendo, culo, debajo del pecho, barriga, imaginé que estando en la pubertad eran cosas de esa edad. Hasta que llegó un grano, como la palma de mi mano, que no me dejaba mover el brazo. Hidrosadenitis supurativa avanzada, me diagnosticaron, con tratamientos para la infección, el escozor, pero sin cura hasta día de hoy. 

Una adolescencia algo dura, desaparecieron las prendas de tirantes, blancas o tonos nude de mi vestuario por miedo a la supuración. Deje de ir a piscinas publicas, playas, por esas caras que me miraban fijamente con dolor. ¿Y el amor? Me aterrorizaba. Miles de ‘ya te llamaré’ que nunca llamaban. Caras de asco. En fin.

Descubrí lo que era el amor, el amor propio. Mis heridas no iban a desaparecen, era extraño sí, pero peculiar y hermoso dependiendo de los ojos con los que los mire. 

Me quiero, quiero todos los rincones de mi cuerpo, y gracias a todos esos capullxs hoy tengo a quien también me quiere, me besa las heridas, me acaricia las marcas, me abraza y me recuerda lo único y maravilloso que es mi cuerpo.

Y tú que sigues en la sombra, somos muchos, no estáis solos, y recuerda, tienes un cuerpo único y maravilloso. 

 

Sara Trari.

IG: @trarariquete_vi