Crushes de la infancia. Personajes de animación femeninos
Hace poco me dejé caer por aquí hablando de nuestros crushes masculinos de la infancia, es decir, esos personajes que nos habían robado el corazón según las personas encuestadas. Hoy os traigo la segunda parte, veamos cuáles fueron las muchachas que más nos marcaron en nuestra infancia:
ARIEL
Como de costumbre, Disney y el mundo del anime se repartieron el pastel. Ariel fue la gran triunfadora, supongo que el outfit playero y su ondeando melena tuvieron bastante que ver. Además de su notable atractivo, la sirenita cambió su voz por unas piernas para ir detrás del chiquito que le molaba. Supongo que lo de “calladita estás más guapa” es un discurso que nos inculcaron a muchas desde pequeña y caló hondo.
MEGARA
Una tía dura (pero no mucho). Tengo que reconocer que siempre me encantó su estética. Ese cabello ensortijado, ese vestidito vaporoso y sugerente, esa mirada felina… Megara nos cantaba aquello de No diré que es amor cuando empezó a sentir el mariposeo en el estómago a causa de Hércules, o lo que es lo mismo, se negaba aceptar el amor romántico, pero acabó sucumbiendo. Imagino que más de uno fantaseó con ser su héroe.
KIDA
También conocida como la chica de Atlantis. Además de desprender una sensualidad innegable, es un personaje muy potente. Es una tía con poder, que gobierna y vela por preservar su cultura y además se fija en el friki-intelectual de turno y no en un cachas de su pueblo ―en este caso, Milo, un traductor de lenguas muertas― (os digo ya que este mojaba poco). En fin, supongo que resultaba toda una sex-symbol para un gran abanico de personas.
De Disney se repitieron más nombres como Campanilla o Nala. De la primera ya hablé en el post anterior, pero de la segunda tengo que decir que me sorprendió especialmente el tirón que tenían las criaturas no humanas. Y sobre todo con El rey león, madre mía, ¿sabéis la de mujeres que me han confesado que les gustaba Simba? ¿O que le ponía Mufasa? El Robin Hood zorro también tenía mucho tirón, Baloo, el ratón que parecía Cocodrilo Dundee de Los Rescatadores en Cangulorandia…
En cuanto al anime, aquí van las chicas que más se nombraron:
BUNNY
La protagonista de Sailor Moon protagonizó más de una fantasía, ¡que me lo digan a mí! Con el tiempo he analizado la serie y tenía un punto erótico que… ojito con las escenas en las que las chicas se transformaban. Además, Bunny encarnaba ese prototipo de niña buena, algo torpe, (en mi tierra diríamos “una chochona”) pero que todos la adoran porque no tiene maldad, y además se transforma en guerrera, es valiente, es amiga de sus amigas, ¿a quién no le va a gustar?
LUM (La chica invasora)
Este anime es menos conocido, pero básicamente es un argumento del estilo a Alf, pero en vez de adoptar a un extraterrestre que parece la versión no queer de Curro de la Expo 92, el prota tiene en su casa a una chica hipersexualizada a la que creo recordar que intenta meter mano, aunque no estoy segura (recuerdo algo de quitarle la parte de arriba del bikini). Creo que no hace falta que explique por qué atraía tanto esta chica.
Al igual que hice la otra vez, todo se resume en estereotipos y preferencias que generamos a raíz de estos. No creo que sea casualidad que el prototipo de chica que más veces se nombró fuera ligera de ropa, con tendencia a la sumisión o a ser rescatadas, incluso en casos en los que son personajes belicosos (recordemos que incluso en Sailor Moon está el Hombre del Antifaz que rescata a Bunny).
También me parece digno de analizar las corporalidades de estos personajes, pero rompiendo una lanza a favor del personal, me atrevería a decir que la mayoría de las representaciones eran chicas curvilíneas tan solo en puntos estratégicos que alimentaban nuevamente el canon de belleza prototípico. Vamos, que la única gorda que recuerdo era Úrsula y era la mala de la película. Esto me daría para otro post, ¿qué me decís?
En cuanto a los animalitos, prefiero no meterme, simplemente me reí mucho leyendo comentarios y os animo a que os preguntéis entre vosotras cuáles eran vuestros crushes de animación de vuestra infancia, fijo que os lleváis más de una sorpresa.
