Tranquila, no estoy dentro de tu cabeza. Simplemente me he hecho esta pregunta millones de veces. Y, ¡déjame adivinar¡ Seguro que normalmente va seguida de las siguientes reflexiones:

  • Me encanta esta foto, pero se me ve la celulitis.
  • Esta foto sería perfecta para Instagram, pero me veo gorda.
  • ¡Qué lástima! Si no fuera porque se me ven las estrías subiría esta foto a Instagram.

Cuantas fotos desaprovechadas ocupando espacio en el carrete por miedo a no encajar en los cánones imposibles de la PERFECCIÓN.

 

real body at beach

 

Cómo diría @danaemercer debemos cambiar la  conversación. Debemos normalizar la imperfección.

Hagamos, entre todas, que las siguientes generaciones ni se planteen si subir o no una foto por si hay celulitis, piel de naranja o estrías. Seamos ejemplo. Somos humanas, somos mujeres. Somos imperfectas. Somos imperfectamente perfectas.

Si nosotras mismas no somos capaces de aceptarlo, ¿cómo lo van a hacer los demás?

Así que,  empezamos con la catarsis. Hola, me llamo Georgina, y:

  • Cuando llevo falda corta y me siento, se me ve la piel de naranja.
  • Al estar sentada se me ven los michelines.
  • Si no llevo sujetador, se me ve el pecho caído.
  • Tengo celulitis en las piernas.
  • Tengo estrías en el pecho y el culo.

 

¡Uf, en serio, pruébalo tú! Al principio te sentirás expuesta pero después LIBRE.

LIBRE de no ser perfecta.

Y, cómo si de una terapia de grupo se tratara, te pongo deberes para finalizar la sesión.  Hazte mentalmente la lista de las cosas que hacen imperfecto tu perfecto cuerpo, y después, cuelga una foto en tus redes sociales en la que se vean una de esas “imperfecciones”. #ImperfectPerfectBody #RealBody

 

i wanted to show my body

 

Alucinarás con el poder que te dará y cómo reaccionará la gente de tu entorno. Te prometo que lo REAL gusta mucho más que lo PERFECTO.