El tema de las infidelidades en pareja parece que cada vez es más y más frecuente y dentro de toda esta marabunta destacan especialmente esas personas que son infiel de forma patológica.

Este tipo de especímenes pueden tener muchas características pero no dejan de compartir una serie de rasgos que nos permite identificarlos y catalogarlos.

Puede que hayas tenido suerte en esta vida y nunca te hayas topado con uno de ellos, pero si has tenido la desgracia de cruzarte con uno de ellos seguro que reconoces una serie de rasgos.

1º El más llamativo de todos es que el tipo tiene novia duradera, el buen infiel patológico por lo general suele llevar bastante tiempo con esa otra persona, están casados y/o viven juntos, y además desde fuera parece el novio 10 y la pareja 100.

Los hay de dos tipos dentro de esta amalgama: los que esconden a sus novias, es decir, no hay ni rastro de sus parejas en ninguna de sus redes sociales, te metes a su instagram y facebook y solo salen sus coleguis y cuando está de viaje parece que se ha ido solo, inquietante cuanto más.

O por el contrario, todas sus redes es un escaparate de su maravillosa relación, la foto de Whatsapp son ellos juntitos en aquel sitio tan especial, su foto de portada es lo más empalagoso del mundo y todo el mundo sabe de su existencia.

Cuando tú lo empiezas a conocer, en muchas ocasiones lo de que tiene novia es un detallito que pasa desapercibido y te acabas enterando de rebote, o bien como tiene más cara que espalda te cuenta que tiene novia pero que las cosas van reguleras.

2º Con su pareja será un hijo de la gran puta, pero contigo se porta como el novio perfecto.

Todos son mensajes currados y bonitos, los buenos días, buenas noches no faltan nunca. Las fotitos de mira vi esto y me acordé de ti, los planes románticos y repentinos (porque claro vuestra relación depende mucho de otra persona) y todo junto gloria.

O esas visitas “sorpresa”, se presenta en tu trabajo de repente, o a ciertas horas cuando sale del trabajo o tiene un hueco, aparece en tu casa sin avisar.

 

Al final no sabes cómo ni cuándo pero acabas pilladísima de este cabrón, porque cuando estás en este punto de la historia ya te hueles que al menos, un poquito cabrón si es.

El sexo, ayyy el sexo, porque ya que estamos enganchadas a este prototipo de hombre, es porque hay algo más que te tiene retenida.

El sexo suele ser bastante bueno, todo sea por la emoción, el riesgo o vete tú a saber, pero por lo general disfrutas como una perra en celo cada vez que os encontráis.

4º Suele ser un incomprendido, si querida mía, él está atravesando un momento de su vida muy duro, porque le va súper mal en (introducir aquí trabajo, pareja, estudios, amigos, el perro…) y al final, da igual sea lo que sea lo que te pase a ti, que lo de él siempre será muchísimo peor.

Esto para su papel de víctima le viene que ni pintado, ya que cada vez que le apetezca alejarse de ti, porque si, o porque le entran remordimientos o simplemente porque se está cansando y necesita novedad, recurrirá a esas excusas de mierda, las cuales por lo general nos terminamos de creer.

Nunca va a dejar a su novia, y esto es algo que tenemos que tener muy claro, muy putas se las tiene que ver un infiel patológico para dejar a su pareja. Incluso si tu se lo planteas el susodicho puede hasta sorprenderse y soltarte un “pero es que yo la quiero”.

Si si si, ¿no lo sabías? Otro de los rasgos que caracterizan a este tipo de personas es que están convencidos de que aman a su pareja, pero claro, no te preocupes que tu también eres muy importante para él (ja!).

Cuando digo muy putas es, que le han pillado de marrón totalmente y es la otra la que le ha dicho “ahí te quedas chato” pero por si mismo, jamás dará ese paso, y si le pillan incluso negará tu existencia. Defenderá su inocencia hasta el final.

Por lo que ves como van pasando las semanas, meses e incluso años y te ves metida en una relación con una persona que tiene pareja, y ningún tipo de intención de dejarla jamás.

Pero ¿Por qué el infiel patológico hace todo esto?

Veréis, en realidad no tiene mucho misterio. El principal rasgo de este tipo de personas es la falta total de autoestima, y aunque tú le veas el típico guaperas (o no, pero él se siente así) seguro de sí mismo, un ligón en toda regla, este tipo de personas son totalmente inseguras.

Estas personas tienen un ego que se alimenta de las conquistas, porque si la gente “lo consume” o “le encuentra interesante” será por algo, pero realmente esto no se lo creen ni ellos y por eso necesitan sentirse deseados por los demás.

Esto los vuelve personas bastante frágiles y además muy egoístas, porque como no se aguanta ni él, su prioridad absoluta es y será él mismo siempre, y se llevará por delante lo que le haga falta, si le hace feliz o le gusta, no hay más.

Por lo que sus grandes listas de conquistas no son más que valores añadidos que se va dando a él mismo, para no sentirse el mierda que es.

Y por lo general este tipo de personas NO CAMBIAN. En terapia me he encontrado muchos especímenes de este estilo y he visto como volvían literalmente locas a sus parejas o las dejaban destrozadas cuando todo se destapaba (porque tarde o temprano aparece la sorpresa).

Por lo que, si conoces a algún tipo así, con promesas de que tú eres la única y que va a dejar a su novia te diré que huyas muy lejos, porque aunque termine dejándola la siguiente víctima serás tú.

Y si te encuentras metida en medio de esta relación de bucles constantes de infidelidades por parte de tú pareja, y te cuesta muchos salir de ahí, es porque seguramente hayas desarrollado una dependencia emocional muy fuerte hacia él. Si ves que tú sola no puedes salir de ahí pide ayuda, porque se puede.

Este tipo de personas no dejan de ser, no solo muy tóxicas, si no personas vacías a muchos niveles y lo que intentarán siempre es arrastrarse a su juego, no te dejes, hazlo por ti.

Aida Vallés Psicóloga especializada en Sexología y Terapia de Pareja

correo: [email protected]    instagram: @aidavallesconsulta.es