Precios de los regalos navideños
Hace unos días vi un tweet circulando, que decía algo así como: si alguien que cobra el salario mínimo te hace un regalo de 20€, esa persona está dedicando tres horas de su tiempo para comprarte algo a ti. Hay que ser humilde. Un regalo no tiene que ser muy costoso para ser valioso.
Mira, sinceramente, no he estado más de acuerdo con algo en mi vida. Os cuento un poco la variedad de dramas navideños que tengo a mi alrededor:
– Una amiga que gana un pastón, pero tiene mucha familia política- Este año no sabe qué regalarles para no quedar como una egoísta, porque sus suegros son demasiado espléndidos con los regalos y ella teme parecer cutre si les compra algo barato. Error: ahí no está importando la falta que les haga el obsequio, sino el dinero que cueste.
– Una amiga que jamás se acuerda del cumpleaños de su primo y, por ello, este año ha decidido regalarle por Navidad un aparatejo caríííííííísimo que, con suerte, su primo va a usar una vez en la vida. Error: conozco al primo y puedo asegurar que le importa tres pimientos que no se le regale nada. ¿Para qué complicarse?
– Una amiga que está en paro y sufre porque sabe que su familia le va a regalar muchas cosas y ella no puede corresponder. Mira, sinceramente, hay cosas monísimas por menos de 5€ y LO QUE CUENTA ES EL CARIÑO QUE LE PONES.
Voy a parecer la nostalgia personificada, pero no hace tanto tiempo que la gente aprovechaba estas fiestas para comprar cosas que necesitaban, que no podrían permitirse sin las pagas extra, o cosas que llevaban muchos meses ahorrando para comprar. ¿Cuándo hemos sucumbido al capitalismo, que no me he dado cuenta?, ¿desde cuándo lo importante es la cantidad de regalos que se reciban, o su precio?, ¿en qué momento empezó a importar más todo el tema de los regalos, que disfrutar con la familia?
Yo me quedé en un nivel A1 de religión, que te da para saber quién era el Niño Jesús y regular, porque te extraña eso de que alguien pueda ser Padre, Hijo y Espíritu Santo al mismo tiempo, sin tener la cabeza liada. Pues ese es mi nivel. Pero me voy a quedar con una enseñanza que me parece importante, independientemente de si crees en Dios, o no: el Niño Jesús se conformó con tres regalos que, seamos realistas, excepto el oro, los demás eran prescindibles (¿para qué se necesita mirra en el siglo XXI?). A lo mejor la gente que tiene que hipotecarse para pagar los regalos de Navidad, se está pasando un poquito.
Ahora que vivimos en una realidad postapocalíptica en la que cualquier día nos confinan y nos tenemos que olvidar de ver a nuestros familiares, ¿no es mejor valorar la compañía, aprovechar las vacaciones para estar juntos, y dejar de preocuparnos por el precio de los regalos?
