Después de 4 novios serios, 19 polvos de una noche, 11 citas en Tinder, 3 citas a ciegas e innumerables fracasos, decepciones y “tierra, trágame”, he dado con la pregunta que SIEMPRE debes hacer en una primera cita.

Cuando he intentado hallar el nexo común que une a todos mis desencantos amorosos, ha habido algo que sobresalía: el 70% tenía conductas que me hacían huir sin mirar atrás. En el 30% restante probablemente la cague yo, que tampoco soy perfecta.

Cuando digo conductas que me hacían huir sin mirar atrás hablo de celos, control, posesividad, egoísmo en el sexo, etc. Es decir, machismo en mayúsculas y con luces de neón.

Por eso, tras tantos dramas, he decidido que siempre debo preguntar algo muy básico:

“¿Qué opinas del movimiento feminista?”

Aquí pueden pasar 3 cosas:

  1. Que ponga cara de limón y diga “yo es que no soy ni machista ni feminista”.
  2. Que se ponga a hablar de feminazis. Seres unineuronales, ya sabéis.
  3. Que te diga que es feminista.

Si el muchacho tiene una confusión mental del copón y no sabe lo que es el feminismo puedes explicárselo o pasar. Yo antes intentaba explicarlo, pero me he cansado de ser la “mami-profe” de turno. Que lo busquen en Wikipedia.

Si el chaval usa el término “feminazi”, lo mejor que puedes hacer es decir que su discurso te da cagalera y marcharte.

En cambio, si se autoproclama feminista, vamos por buen camino, pero todavía quedan aspectos por dilucidar.

Aquí nadie es la policía del pensamiento y  tampoco es plan de interrogar a nadie, pero LO PEOR del mundo es un tío que va de aliado sólo para meterte el rabo. Y existen amiguis, vaya que si existen.

Por eso lo mejor que puedes hacer es hablar un poquitín de feminismo para ver cómo se desenvuelve el chaval.

Ante la duda puedes fiarte y estar alerta ante cualquier señal de que es un señoro, pero de verdad, mi consejo es que no salgáis con hombres machistas. Al principio parecen lo más maravilloso del mundo, te intentan dar pena hablando de lo “locas que estaban sus ex”, de lo mucho que te quieren y te cuidan, pero después se le ven las orejas al lobo.

Estamos en un momento social en el que informarse sobre feminismo es tan fácil como entrar en google, y por desgracia desinformarse también. Hay periódicos y webs serias en las que se analiza la opresión a la mujer y otras en las que se nos ningunea y tacha de exageradas e histéricas. Si una persona prefiere fiarse de estas últimas, yo ya no tengo nada más que hablar con ella.

He dejado pasar comportamientos tóxicos porque “pobrecito, le han criado así”, y al final quien acababa jodida era yo. Ahora lo tengo claro, en mi vida no entra un machista.

¿Qué opinas tú? ¿Saldrías con una persona machista? ¿Qué preguntarías en la primera cita para salir de dudas? ¿Te parece exagerada mi postura?