Desde que el Covid-19 hiciese mella en mi olfato de sabueso incorruptible, no soy la misma persona. Yo, que olía unas patatas fritas con Ketchup de Chiringuito de mañaneo a kilómetros, ¡incluso en otro pueblo! Que era capaz de calcular solo oliéndole el aliento a mi marido la cantidad de cervezas que se había tomado en una tarde ¡YO!

Pues después de perderlo por completo y hacer sesiones de regresión olfativa esnifando el ambientador del armario, a día de hoy aún puedo confirmar que no he recuperado del todo mi sentido más desarrollado.

Que me he quedado minusválida de olfato, vamos.  Y eso en mí es un hándicap, ¡sí lo es, yes yes!  ¿Por qué? Porque está proporcionalmente y directamente conectado a mi intuición y mi lado esotérico. Sí, ese de ser bruja y no solo por la nariz aguileña a lo Señora de Palma, no de Mallorca, digo por la Rossy… Bueno, ¡Qué importa! Muy a mi pesar, ahora temo que se me vayan a empezar a pasar cosas por alto, como no saber qué dice exactamente esa mirada que aquel le ha echado a aquella otra o no que no vaya a pillar las mentiras que me meten dobladas.

Sin embargo, por supuesto que esto me asusta, ¡como para no! pero lo que más Almodóvar me tiene, es decir, más mujeres al borde de un ataque de nervios es: ¿podré captar nuevos perfumes de hombre que me atraigan? Y la verdad, me entristece que mi pituitaria se pueda privar de ese placer. Porque en mi universo del olor hay un pódium de colonias o perfumes de hombre, esos que de solo olerlos se me abren las puntas.

Os los paso a detallar, igual alguna psicótica de los perfumes de hombre se siente identificada conmigo, por orden de menos a más los olores que me hacen girar por la calle y que directamente me hacen desear a aquel que no miraría normalmente. Estos olores que me hacen darme la vuelta ipso facto a su paso, muy a lo Bisbal en Bulería o como Speedy Gonzáles siguiendo el olor del queso, con la misma babita cayéndoseme por la comisura.

Tercera posición para 1 MILLION – Paco Rabanne:

Cuero fresco con un sutil toque picante. Seduce y luego conquista.

Ya os lo resumo yo un poco mejor: la hueles y se te dan vuelta las bragas.

Ya lo dice mi amiga “La Rebe”, y recito literal: “Cuando voy por la calle y la huelo, rezo 27 Ave Marías para que al darme la vuelta sea un empotrador”. Muy ella, que se ha formado en las Mercedarias como yo, y se nota el toque religioso. Y es que esta colonia huele a hombre que le gusta gustar y a último toque de matador frente al espejo. Sea lo que sea, nos pone como a perracas en celo, aunque suene muy primitivo y nosotras seamos muy mujer indepe.

Segunda posición para Aqua di Giò – Giorgio Armani:

Las Notas de Salida son lima (limón verde), limón (lima ácida), bergamota, jazmín, naranja, mandarina y neroli.

Poco importa, lo que nos interesa es que huele a tío bueno de peli de surfista rollo Patrick Swayze en “Le llaman Bodhi”. Colonia que podría compartir fácilmente con Keanu Reeves también, y es que cuando me los imagino, sé que tienen que oler así, por lo menos. Es fresca y muy agradable y  magnética. Eso sí, para fresca yo cuando la huelo, que pierdo el sentío.

Primera posición para Dolce & Gabanna Pour Homme – Dolce & Gabanna

Nota de salida del aceite de flores de naranjo, de una valiente masculinidad, da paso a los toques cítricos de la mandarina y la bergamota. Y ojo a lo que dicen sus propios creadores: “esencial para el amante latino mediterráneo, que es capaz de proyectar en la imaginación colectiva la fuerza icónica de una atracción sexual y una ternura irresistibles.”

Mi apreciación muy resumidamente: es la **** mejor colonia de hombre de la historia.

Es más, una vez me enrollé con un tío solo porque se la había echado, que ni del nombre de él me acuerdo. Eso sí, le pregunté por la colonia y se la regalé sistemáticamente a todos los novios que tuve después. La gloria. Y es que no sé si quiera qué es la bergamota, pero la amo. Es olerla y se me activa el instinto de loba en mi panel de hembra megabásico. Y es que una alguna debilidad tenía que tener y la mía es este elixir de Dioses.

Siendo sincera, lo que realmente me da miedo de la secuela que me ha dejado el bicho, es que algún día pase por mi lado un usuario de cualquiera de estas colonias y se me escape, porque hasta ahora mi radar ha sido infalible, pero y ahora, ¿quién me asegura que mi poder nasal no necesita vacuna?

Artículo no patrocinado, aunque si queréis comprarme me dejo, y para hacer el anuncio de la de Giorgio Armani con semejante elemento, una servidora, la primera.

MUXAMEXAOYI