Soy madre de dos niños preciosos, sanos y maravillosos a los que quiero y venero con locura. Soy incapaz de imaginar mi vida sin ellos, pero reconozco que a veces echo de menos mogollón de cosas de mi vida sin hijos:
Echo de menos el silencio
Echo de menos la manicura impoluta al menos 24 horas
Echo de menos ir sola al baño
Echo de menos levantarme a la hora que me dé la gana los fines de semana
Echo de menos dormir una noche entera del tirón
Echo de menos improvisar
Echo de menos una tarde de sofá, peli y manta
Echo de menos llevar un mini bolso en lugar de una mochila repleta de cosas
Echo de menos leer un libro en la playa
Echo de menos ir a un festival de música y bailar hasta el amanecer
Echo de menos irme de cañas, y que las cañas pasen a gintonics y los gintonics a chupitos de jager
Echo de menos las escapadas a cualquier parte sin cobertura
Echo de menos la casa ordenada
Echo de menos los días sin horarios
Echo de menos hacer cualquier cosa para cenar
Echo de menos los viajes en coche sin paradas cada media hora
Echo de menos atender una llamada de teléfono sin interrupciones
Echo de menos ir de tiendas solo para mi
Echo de menos la irresponsabilidad
Echo de menos ver una serie del tirón
Echo de menos que mis padres pregunte por mí y no por mis hijos
Echo de menos pasar más tiempo con mis amigas y menos con las madres de otros niños
Echo de menos salir tranquilamente del trabajo dando un paseo en lugar de ir como loca corriendo
Echo de menos los días de no hacer nada
No os voy a mentir, de vez en cuando me concedo algún deseo. Pero echo de menos hacerlo sin sentimiento de culpa. ¿Y tú que echas de menos?
Foto de portada y gifs: Zooey Deschanel en «New Girl»