El pueblo ha hablado: Nubia Muñoz es la protagonista del Herstory de esta semana; y no es para menos, ¿quieres saber por qué? Te doy un adelanto: es la mujer que hizo posible la creación de la vacuna contra el cuello de útero (que es la única existente contra un tipo de cáncer), vacunación que tantas vidas ha salvado, así que me siento muy orgullosa de poder presentáosla. Además, es la primera mujer latina y científica de nuestra sección, que ya era hora, mea culpa.
Nuestra friend nació en 1940 en Cali, Colombia. Provenía de una familia de agricultores pobres y su infancia se tornó muy dolorosa con la muerte de su padre por difteria (una enfermad infecciosa que afecta a los pulmones y el sistema digestivo); asimismo, su madre tuvo que sacar adelante a sus 5 hijos (Nubia era la pequeña y tenía 6 años). Ella recalca que esto le motivó a estudiar medicina, puesto que su padre podría haberse curado si hubiera recibido medicación adecuada.
En su juventud se reveló como una estudiante brillante. Estudió en el Liceo Departamental Femenino del Valle del Cauca y a los 18 años consiguió entrar en la Facultad de Medicina de la Universidad del Valle con la nota de admisión más alta; de hecho fue la primera de su familia que consiguió cursar estudios universitarios. En 1964 se graduó y el 1967 se especializó en Patologías. Pero ahí no acaba su formación y yo, como buena pesada os la voy a contar: se va a Estados Unidos y allí cursa una Maestría (que es un título de posgrado que demuestra un alto nivel de experiencia en un área específica, como un Máster vamos) en Salud Pública con atención en Epidemiología del Cáncer por la Universidad de Johns Hopkins (esto a mí me recuerda a Stranger Things, nenas, que queréis que os diga) y más tarde estudia Virología y Epidemiología en el Instituto Nacional de Cáncer en Bethesda, que es una sede mundial para los estudios médicos. Yo tengo un Máster y me creo alguien en la vida, en fin.
Hago un inciso para explicar que es la Epidemiología porque es algo que estamos oyendo mucho últimamente y yo que sé, por si hay dudas: es el estudio de las características que pueden resultar determinantes para las enfermedades generales y su control. Tucutú. Hoy estoy tirando mucho de coletillas, perdonadme el espesor mental.
Bueno, ya para acabar con la retahíla de títulos os cuento que en 1969 se unió a la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer en Lyon (Francia) y en 1986 comenzó a liderar la Unidad de Estudios de Campo e Intervención.
El gran hito de su carrera da sus frutos después de 20 años de trabajo: consiguió establecer que el virus del papiloma humano es la causa principal del cáncer cervical, lo que conllevó que se pudiese gestar la vacuna contra éste.
Pero vamos por el principio, ¿qué es el virus del papiloma humano? Pues, ni más ni menos, la enfermedad de transmisión sexual más común del mundo, el 80% de las personas con una vida sexual activa normalita la va a padecer a lo largo de su vida (si amigas, hay que usar condón siempre!). Realmente son un grupo de virus relacionados entre sí que pueden causar verrugas en distintas partes del cuerpo. Hay más de 200 tipos y unos 40 afectan a los genitales, y por ende, se pegan a través del contacto sexual. No todos estos tipos provocan cáncer (de hecho la mayoría de la población no sabe que tiene esta enfermedad porque no da ningún tipo de señal) pero algunos (unos 20), en especial los tipos 16 y 18, y si no se trata el VPH de alto riesgo, sí pueden causarlo. Además, entre la infección y el desarrollo del cáncer pueden llegar a pasar de 20 a 30 años.
Y como no, esto ocurre más en países en vías de desarrollo (de hecho el 80% de los casos se dan ahí), donde los recursos son limitadísimos, sobre todo a nivel de protección, información y ayuda sexual. Nubia tenía muy claro esta parte del pastel y de hecho luchó por esta lacra y porque todas las niñas, independiente de su nacionalidad, tuviesen su vacuna. La cual, por otra parte y pese a las muchas críticas por parte de los «antivacunas» (que llegaron a extender bulos sobre problemas secundarios graves) es completamente efectiva.
Los datos son arrolladores: la vacuna está disponible desde 2006 y se da en 84 países. Todas las versiones protegen contra los tipos 16 y 18 y algunas contra más variantes. Hoy en día, gracias a ella, se previenen el 90% de los casos de cáncer de cuello de útero, el 80% de los cánceres de ano, el 60% de cáncer vaginal, el 40% de cáncer de vulva y algunos casos de cáncer de boca y garganta.
Sin duda, Nubia Muñoz, es una de las científicas que más vidas ha salvado y debería tener mucho más reconocimiento entre la población general. Y, ¿qué opina nuestra protagonista de este logro? Ella comenta que «es como un sueño hecho realidad. Soy muy consciente de que soy una investigadora privilegiada. Muy pocos epidemiólogos ven que su trabajo da la prueba definitiva que permite resolver un problema de salud pública importante»
Ha conseguido numerosos premios internacionales y de hecho, en 2008, fue nominada por la Asociación Internacional de Epidemiología al Premio Nobel de Medicina. Lo lograron sus compañeros, los propios creadores de la vacuna como tal.
Y acabamos este Herstory con otra de sus frases: «nunca ha sido complicada (hablando de su investigación y amor por la ciencia), sino que ha sido un placer porque estoy haciendo lo que me gusta hacer. Siempre me propuse investigar para ayudar a la gente» Pues, en ese caso, gracias Nubia, gracias por darnos la vida.
Un recordatorio importante: para la que me está leyendo, si esto te preocupa, puedes pedir una prueba de ETS a tu médico de cabecera, y de hecho es aconsejable que os hagáis una al año, hayáis tenido relaciones de riesgo o no. Si las has tenido es recomendable que te la hagas en cuanto puedas. Estas pruebas ni duelen ni cuesta dinero, y ganas en salud física y mental, así que porfa, cuidaos. Un abrazo compas.
