Pues al final le pedí que se casase conmigo y no salió como esperaba

Amor & Polvos Y Doctor Amor 21 junio 2023

Parte 2: Deseadme suerte, le voy a pedir que se case conmigo. 

A veces idealizamos tanto una idea, un momento, que cuando nos viene la realidad nos pegamos una buena hostia contra el suelo. Y no se a vosotras, pero a mí esto me pasa constantemente. Pero que oye, no aprendo a verlo venir.

Volviendo atrás, le pedí que se casase conmigo, con una puesta de sol preciosa, yo también guapísima y en un lugar maravilloso. Me puse muy nerviosa, no me arrodillé y me faltaron demasiadas cosas por decirle. Hice lo que tenía en mi cabeza, pero con muchas nubes provocadas por los nervios mortales del momento. Y realmente creo que había algo dentro de mí que me decía y me gritaba que no tenía que hacerlo, pero lo hice. Y me di cuenta de que, aunque todo lo que había a mi alrededor era lo que había preparado, de que todo estaba tan perfecto como quería, nosotros no estábamos acompañando a lo que se esperaría de pedirle al amor de tu vida que se case contigo.

Y es que estábamos preocupados, arrastrando una semana anímicamente un poco complicada y quizá forcé la máquina. Me dijo que sí pero su cara no era la que había imaginado, no había esa ilusión y ese amor que esperaba, más bien lo contrario. Parecía que estuviese triste, serio, y al final la pedida se convirtió en un recuerdo un poco agridulce.

Después de eso yo me vine bastante abajo, le enfrenté en varias ocasiones para que fuese totalmente sincero y me acabó confesando que quiere casarse conmigo, pero ahora no.

Antes tenemos que poner en orden algún que otro problema que nos queda todavía sin atar, ir a terapia de pareja y ahorrar dinero. Porque esa es otra, la idea de una boda, por muy sencilla que sea, se nos escapa de nuestras manos y de nuestra economía a día de hoy.

Han sido días duros, en los que he llegado incluso a plantearme la relación y en los que la ilusión que yo tenía se ha visto pisoteada por una nube gris. Seguimos juntos, obviamente, pero no sé a veces que pensar. No sé si soy la única loca del coño intensa que piensa que si ama a alguien le da igual casarse con un vestido de Shein y brindar en un bar de barrio si es lo que toca, no sé si soy la única que sabe que todas las relaciones tienen sus baches, pero si ama a alguien, le querrá siempre y enfrentará cualquier adversidad y problema de la mano de su acompañante de vida.

No sé si a lo mejor he idealizado mucho, si me he dejado llevar por lo que se espera de una película ñoña de princesas, no sé si lo que está mal está en mi cabeza. Pero he decidido bajarme de la nube, tratar de aclarar los nubarrones que han venido estos días después del “rechazo” y vivir de nuevo a ras de suelo, en la jodida realidad.

Si en algún momento tenemos que casarnos, lo haremos, al final el destino es así de caprichoso. Pero por ahora, la idea está en stand by.

 

Whirlwind

 

Te puede interesar