PERRITOS, GATITOS Y SEXO

A pesar de que esto parece un testimonio de zoofilia o de temática furry no tiene nada que ver con ninguno de los dos.

A día de hoy si alguien te preguntase ¿qué hace tu mascota mientras estás teniendo sexo? ¿Qué responderías exactamente?

Yo no sé vuestros peludos, pero mis perros se dedican  hacer una serie de cosas que pueden llegar a ser muy desagradables.

Una de ellas es que mientras estás tú ahí bien motivada, dándolo todo, creyendo que estás haciendo el trabajo más fantasioso de tu vida, de repente miras a un lado y ahí está. Su cara. La cara de tu perro, mirándote desde el suelo de la cama. Está contemplando la escena bien atento, sin perderse detalle, ya sea sentadito mirándote fijamente a los ojos o apoyando la cabeza en la misma cama que tú estás profanando con tus ansias de lujuria.

En ese momento en que tu perro parece que está memorizando todo el procedimiento, tú no sabes si parar a acariciarlo, mandarlo al carajo o hacer como que no está ahí y no lo has visto para seguir a lo tuyo (aunque esto es una trampa, porque una vez que hay contacto visual no hay vuelta atrás, estás perdida). En esta parte tengo que decir que mis perros no se suben a la cama, pero cuando he tenido gatos ha sido una odisea, porque el gato no te miraba desde la indiferencia gatuna. El gato se metía en la cama a ser partícipe de la acción, y me veías ahí a mí y a mi compañero echando al gato.

Otra de las cosas que ADORAN mis perretes es aprovecha cualquier tela que toque el suelo para acostarse en ella y  dejar ahí todos sus pelos y olor perruno. ¿Te quitas un pantalón en el pasillo? El perro se echa la siesta en ellos. ¿Tiras las bragas desde la zona de acción? Perro encima. ¿Se caen las sábanas, mantas y derivados de la cama? Perro acostado en ellas cuando vas a recoger el estropicio. Y lo más gracioso es que cuando los ves haciendo la fechoría de acostarse en un sitio que no deben te vienen a saludar con cara de `¿bueno qué, ahora me vas a hacer caso por fin?´

Pero sin duda, mi cosa favorita del mundo mundial es que se coman los restos del crimen. Seamos sinceros, los perros son perros, son asquerosos, se comen las mierdas que ven por la calle y los cangrejos muertos del río, ¿de verdad creéis que les parece desagradable comerse UN CONDÓN?

La respuesta es no. Alguno de mis perros va a buscar los condones usados a la papelera. Y quién dice condones, dice el pañuelo o la toallita que te has pasado por la zona para quitarte los efluvios coitales o un juguete sexual que a ellos les parezca divertido y esté a su alcance.

Como conclusión os diré que las mascotas hacen estas cosas de forma normal, eso es que te quieren y tú cuando estás con el chirri caliente no te pones a pensar dónde está cada uno de ellos para que no se te meta en medio, así que haces y deshaces estén o no en la misma habitación que tú.

Pero en el caso de tener perros aspiradora que se comen todo lo que encuentran tenéis que tener cuidado, porque comerse un plástico les puede hacer mucho daño y hay que llevarlos al veterinario para sacárselo. Allí no os van a juzgar porque  los estómagos de los perros son como una alcantarilla, hay de todo. Así que folla en compañía de tu colega peludo pero siempre pon un ojo en que no acabe mal por tus descuidos. Por último quiérelo mucho y cuando acabe el fornicio dale la dosis de amor que se merece.

 

Milvus Orión