Prometí que volvería, como Terminator, así que aquí estoy, una vez más, para ayudarte a que tu gato NO sea un Terminator. Puedes ver la primera parte clicando aquí.

Hoy vamos a centrarnos en los sentidos de los gatos y sus expresiones:

  1. Ojos de gato. ¿Hay algo más bonito, aparte de que te regalen un millón de euros? Nunca he visto tanto dinero, pero también debe ser una maravilla. Las pupilas de un gato le permiten ver bien en la penumbra y se adaptan a estados de ánimo y situaciones como la caza, donde se dilatan, o cuando das al interruptor en la habitación donde estaba durmiendo la siesta, las pupilas se contraen y el gato se caga en tus muelas. Y si recuerdas del artículo anterior, la fijeza de la mirada también es importante: una mirada fija y alerta es un “Run, bitch”, mientras que un parpadeo lento y/o un entrecierre mientras te mira, es un cat kiss. Ah, y si es fija pero no está observando nada en concreto, es que se está quedando dormido.
  2. Los bigotes. Los gatos son hípster, eso es así, por eso: nunca cortes los mostachos del gato, ni las cejas, ni ese par de pelitos en las patas delanteras. ¿Por qué? Porque estos pelazos, llamados vibrisas, son una forma de tacto, de comprender su entorno, y si se los cortas irá tan aturdido como cuando has pasado toda la noche en la discoteca. Odiará las tijeras y te odiará a ti, y no queremos eso. Si has visto a algún gato esquilado (queda muy extraño), normalmente les dejan la cabeza-león y mitones, por las vibrisas, aunque su venganza igualmente será terrible. 
  3. Miau, urrr, meor, ma y similares. Un gato hace más de cien sonidos diferentes (como los bufidos, chirridos y el ronroneo), bravo por el figura que los ha contado. Cuando maúlla a las personas es porque intenta comunicarse como hacen los bebés con sus madres, en realidad cuando son adultos no maúllan tanto entre ellos. Excepciones: cuando el animal está en celo, cuando está en modo “están volando hostias y alguien tiene cara de aeropuerto” y cuando necesita ayuda seriamente. Pro tip: un gato tiende a imitar la voz de su persona, por eso cada felino “habla” de forma diferente.
    En este vídeo puedes escuchar los diferentes sonidos bien explicados, para prepararte por si se desata el Apocalipsis en la mente de tu gato: https://www.youtube.com/watch?v=TpIaKZ0pIVM 
  4. Las orejas, el lomo y la cola. No hay que subestimar el lenguaje corporal. Ya se lo dijo Úrsula a Ariel, y es bien cierto. Como verás en el fantástico esquema siguiente, las orejas plegadas o la cola erizada y/o moviéndose rápidamente también es un “Run, bitch”. Sin embargo, dejar su olor, estirarse las uñas o hacer vibrar la cola implica que suelta feromonas y que está contento y en paz porque todo eso es suyo. Sí, tú también lo eres.Resultado de imagen de cat body languagehttps://www.doggiedrawings.net/freeposters
    La dirección que ves es la web de la que he sacado este pedazo póster explicativo, hecho por Lili Chin, y tienes un montón de dibujos más igualmente interesantes y… gratis.

Ahora ya sabes unas cuantas cosas más sobre tu gato, y es muy importante entenderlo para llevarte bien con él. I’ll be back con más claves para que tu gato no te odie a muerte.