Recuerdo que de pequeña me parecía horrible que un chico supiera que me gustaba, pensaba que lo peor que me podía pasar era que alguien dijera ‘A Carla le gusta Fulanito’ delante del susodicho Fulanito y yo me empezara a poner roja y a querer hacerme pequeñita y desaparecer… Y esa vergüenza por el qué dirán o el qué pensarán me ha perseguido muchos años y me ha costado mucho librarme de ella, pero con esfuerzo lo he conseguido. Sin embargo, sé que no soy la única que se ha perdido un montón de cosas por miedo o por vergüenza y es hora de ponerle fin a esa situación. ¿Cuántas de vosotras habéis dejado de hacer cosas que de verdad queríais hacer sólo por miedo o vergüenza?
¿Viajar sola?, ¿hipotecarte?, ¿decir ‘Te quiero’?, ¿cambiar de trabajo?, ¿apuntarte a clases de Danza del Vientre?, ¿comprarte eso que no te pega nada pero que siempre has querido tener? No te quedes con la duda, si de verdad quieres hacer algo mueve el toto y hazlo! No te quedes estancada en el qué dirán, no le des tantas vueltas, atrévete, mójate, ¡lánzate a la piscina! Por supuesto no actúes a lo loco, salta en la parte que sabes que puedes hacerlo, mira siempre que haya agua, no te lances sin mirar porque el batacazo puede ser fuerte…
Si quieres ir a ese destino que estás deseando conocer y nadie te acompaña, hazlo, viaja sola, puedes descubrir cosas sobre tí, sobre otros, encontrar el amor (por una persona, por una ciudad, por nuevos sabores en la comida). O simplemente puedes descubrir que viajar solo no es para tí y no volver a repetir nunca. Y eso que uno no sabe que no le gusta el brócoli hasta que no lo prueba, así que haz las maletas, busca tu destino y viaja!
Tal vez estés pensando en cambiarte de casa, mudarte a un piso mejor, más céntrico, más grande, más caro. Tal vez piensas en dejar de malgastar el dinero mes a mes en alquilar y has decidido comprar. Busca, compara y si encuentras algo mejor… compra! Encontrar una buena hipoteca es como encontrar un buen hogar, hay que informarse, informarse, ¿he dicho informarse?, preguntar, hacer comparativas, pensárselo mucho… Si, es un esfuerzo, pero si de verdad quieres hacerlo, hazlo!
¿Tienes miedo de ser la primera en decir ‘Te quiero’?, ¿qué es lo peor que puede pasar?, ¿que en vez de con otro ‘Te quiero’ te contesten con un ‘Gracias’?, ¿que pienses que por ello vas a morirte?… Una cosa te digo, no serás ni la primera ni la última, no te vas a morir y no será peor que caerte de morros en medio de un montón de gente. La caída siempre será peor. Lo del ‘Te quiero’ lo olvidarás en poco tiempo…
A lo mejor estás deseando cambiar de trabajo pero no te atreves; y no me extraña, porque no está ahora mismo el mundo laboral para arriesgarse mucho, pero hay que sopesar los pros y los contras de todo. En el último año, una amiga consiguió la Green Card, dejó su trabajo y está viviendo ahora en Los Ángeles; otra mejoró dentro de su sector laboral y ahora tiene un trabajo que le gusta, en el que disfruta y con el que se siente realizada; otra se vio metida en un ERE y se encontró de repente desempleada, decidió reinventarse, emprendió y en un mes se va a San Francisco con una start up española; otra vino de Portugal a España sin trabajo y en unos meses encontró por fin algo de lo suyo; otras seguimos trabajando en lo mismo desde hace uno, dos, o cuatro años, porque nos gusta, porque estamos cómodas, o tal vez porque tenemos miedo de lo que pueda haber ahí fuera. Piénsatelo, pon todo sobre la balanza, sopesa los pros y los contras, pero si crees que puedes mejorar cambiando de trabajo, adelante! Pero recuerda, siempre en la parte honda de la piscina…
Atrévete por una vez a hacer algo sola, ir al cine, a comer, a una exposición, apúntate a alguna actividad, al gimnasio, a Danza del Vientre, a clases de macramé. Retoma ese idioma que tienes atravesado porque ‘es que pronuncio fatal’, ‘es que no se me queda’, ‘es que me aburro en clase’… No hay nada mejor que apuntarse a algo sola para no sentirte sola en absoluto. Recuerda cómo han sido estas cosas en tu adolescencia: ‘Hola, somos Pili y Mili, venimos juntas a clase de Inglés’. Y Pili y Mili nunca más volvieron a hablar con nadie de su clase de inglés. Que no te de vergüenza hacer cosas sola, nadie va a pensar que lo haces porque no tienes amigos, trust me…
¿Cuántas veces hemos dejado de comprarnos o ponernos algo sólo por el qué dirán?, o porque pensamos que no nos pega, o porque no estamos convencidos de que nos vaya a quedar bien… ¿Quién dictamina eso?, ¿acaso de pequeñas nos dieron un manual que decía ‘Fulanita: hippie’, ‘Menganita: siempre de negro’, ‘Zutanita: clásica’?, no, ¿verdad?, pues olvida los convencionalismos y cómprate esa mini falda, ese crop top tan mono, ese labial rojo que estás deseando probar y que hasta hoy no te habías atrevido! Y si alguien viene a decirte que no te pega, pues peor para él, tan mona que vas tú con tu nuevo look…
Ya lo decía Peret, ‘De los cobardes nunca se ha escrito nada’, así que lánzate a la piscina, 2016 puede ser tu año.
