Mira, yo es que no puedo, de verdad te digo: odio los tangas. No sé si será porque me sobran unos kilos o por la forma de mi cuerpo, no tengo ni idea, pero chica… yo con un tanga soy menos erótica que Chewbacca afeitado y en lencería.
Luego veo a otras chicas con tanguitas y las veo divinas, pero es ponérmelo yo y reviento el término de vergüenza ajena por cada esquina. Me sientan fatal ¿Solo me pasa a mí? ¿Por qué todas las chicas están monísimas en tanga y yo no?
Quizás es porque mi culo está lejos de ser un culo Kardashian y más cerca de ser material escolar, en concreto… una CARPETA. ¿O quizás es porque soy ancha de cadera? No lo sé, pero mira, cada vez que doy una oportunidad a un tanga me pasa lo siguiente:
• Parezco un zancarrón de caldo: ¿Sabes los trozos de carne bridada que se meten en los pucheros para hacer sopa? PUES ESO SOY YO CON UN TANGA ¿De dónde salen tantos michelines? Que sí, que no estoy delgada y me salen pliegues hasta cuando sopla el viento. Pero coño, es ponerme un tanga, me miro de frente al espejo y es que chica, parezco un Shar Pei.
• Mi culo se pone triste: Yo no me he hecho ningún lifting brasileño de esos ni soy adicta a las sentadillas. Tengo celulitis en el culete y tengo un culo más bien tirando a comedido en volumen. Con una braguita brasileña o normal me veo el asunto hasta apetecible y me encanta como me sientan las braguitas de encaje. ¿Pero con tanga? ¡Si parece que tengo el culo rectangular!
Si me pongo un tanga de cadera para no parecer una pelota anti estrés arrugada, el culo se me pone triste. Enserio, parece que aún tengo el culo más plano, se me ve toda la celulitis y parece que tengo el culo tan cuadrado como Bob Esponja.
Si me pongo un tanga más alto que favorezca la forma del culo el tema en la parte trasera mejora algo, pero ¿Hola? Mi cintura desaparece y parece que me voy de vacaciones con el flotador ya puesto.
• El tanga me intenta violar: ¿Pero a dónde van los tangas? ¿Qué es lo que pretenden? No sé si soy sólo yo, pero a mí me hacen una presión entre los cachetes que parece que se quiere marcar un folleteo anal conmigo. A mí me aprietan TODOS, no he encontrado ningún tanga que no intente violarme el anito. La sensación para mí es desagradable, es como ir sentada sobre un trozo textil que se mete por mis rinconcitos, por mis sitios especiales.
Por no hablar de los movimientos que hacemos algunas para recolocarnos el tanga con la ropa puesta ¡Dignos de coreografías abstractas, créeme!
• Los tangas tienen afán de protagonismo: Si llevo pantalones y tengo que agacharme, sé que el tanga aprovechará la situación para tener su momento estelar. Eso es algo que asumes cuando decides combinar tanga y pantalones. Pero es que luego, cuando llevo un vestido, mis cachetes van bailando samba a su puto pedo debajo de mi vestido. No sé tú, pero yo cuando llevo tanga y vestido, sólo por el movimiento de mi culete al andar, cualquiera que me vea ya sabe que voy con tanga.
Aunque odio los tangas, reconozco que algunos tienen superpoderes, porque en muchas ocasiones me he sentido mil veces más sexy cuando he decidido ponerme un tanguita de encaje y enseñar cachete, pero mira, esa sensación se acaba rápido cuando me miro al espejo y me veo el asunto.
No sé ¿Qué tipo de tangas utilizáis? Porque aún no he perdido la fe y confío en encontrar mi alma gemela tanguil en algún lugar de este mundo ¡Así que seguiré buscando!
