Amiguis, hoy os voy a compartir lo que para mí es un básico indispensable en mi casa. Me encanta cocinar pero a veces ni tengo tiempo ni tengo ganas, sobre todo después de estar todo el día trabajando y desde que probé esta receta de patatas, os prometo que no he parado de hacerla. Es fácil, sencilla y rápida, lo tiene todo oiga.

Necesitas:

  •  Patatas
  • Sal
  • Pimienta
  • AOVE (Aceite de Oliva Virgen Extra)
  • Especias variadas (Yo uso Ajo en polvo, Perejil, Curry, Pimentón picante y tomate en polvo)
  • Bandeja para horno y papel vegetal.

Lo primero que tienes que hacer es lavar las patatas a fondo, ya que vamos a conservar la piel. Las cortamos como ya he dicho con piel incluida en gajos de grosor medio. El tiempo de cocción varía un poco en función del grosor de las patatas.

Vertimos todos los trozos en un cuento y echamos un chorreón de AOVE. Con un poco basta. Luego salpimenta al gusto, remueve bien y condimenta con tus especias favoritas. Yo suelo ponerle un poco de todo, ajo en polvo, perejil, orégano, tomate en polvo, pimentón picante, curry, cúrcuma… aquí puedes lucirte. Cuantas más especias, más sabor.

Remueve con las manos hasta que estén bien integrados todos los ingredientes, coloca en una bandeja de horno con papel vegetal a 180 durante aproximadamente 30 minutos y a comer.

Las patatas se quedan crujientes por fuera y blanditas por dentro, están muchiiiiiiísimo más ricas que si estuvieran fritas, tienen más sabor, no gastáis tanto aceite (se nota a final de mes) son más sanas y encima tardáis 10 min en prepararlas, luego las metes en el horno y te olvidas. ¡Son todo ventajas!

 

Y si les echas queso ya lo flipas. Mira esto. 

Paula Aranda