Lo de ser gorda y rozarte los muslos en verano parece un pack indivisible y ya hemos hablado muchísimas veces de cómo prevenirlo (REMEDIOS AQUÍ!), pero ¿qué pasa si ya te has rozado?

¡Don´t worry, baby! Aquí te traigo un variadito de soluciones para aligerar las molestias.

Lo más importante es mantener limpita y seca la zona. Después de esto hidratar, hidratar y más hidratar.

Para ello podéis usar la crema hidratante que uséis normalmente o tirar de las siguientes opciones que os propongo.

  1. Aceite de caléndula.

Este aceite que puedes encontrar en cualquier herbolario tiene propiedades anti-inflamatorias y anti-bacterianas. Nos vendrá genial para aliviar la zona y evitar que se creen infecciones si el roce se os ha ido de las manos.

Eso sí, es hiper pegajoso. Yo recomiendo usarlo en casa para dormir, ya que así evitas manchar la ropa y el pegoserío no te molestará.

 

  1. Vaselina.

La vaselina nos sirve tanto para evitar la rozadura como para curarla. Si ya tienes la zona muy muy irritada yo te recomiendo usar otro método y tener la vaselina como apoyo para cuando estás fuera de casa y quieras reforzar la hidratación.

 

  1. Lubricante.

Lubricante, sí. Ese que usamos cuando queremos alegrar el tema que te quema. Viene sirviendo para lo mismo que la vaselina: prevención y curación. Te hidratará y prevendrá su reaparición. Si además usas alguno con efecto relajante (¡ay, pillina!) te aliviará mucho el malestar de la zona.

 

 

  1. Aceite de almendras.

Por todas son conocidos los múltiples beneficios de este aceite. Pues también te servirá para las rozaduras. Hidrata muy mucho y, lo mejor, evita que se oscurezca la zona una vez que se ha curado. El problema, como cualquier aceite, es el pegajoserío. Eso sí, este no mancha nada de nada. Lo puedes encontrar en cualquier farmacia en formatos muy económicos.

 

  1. Aloe vera.

El aloe vera es bueno pa tó, ¿no iba a ser bueno pa esto? Si cortas directamente un trozo de la planta y lo aplicas mejor que mejor. Yo he llegado a ponerme un trozo de aloe vera en los muslos y sujetarlo con vendas para dormir. Al día siguiente TODO CURADO. ¡Mano de santo, niña! Eso sí, incómodo es un rato.

Si no dispones de un planta en casa también te pueden servir los geles y cremas de aloe vera que encuentras por los supermercados. Hay un gel en mercadona que es bastante bueno y económico .

 

  1. Bepanthol

Esta es mi arma secreta. Una maravilla del universo. Bepanthol es la típica crema que te pones cuando te haces un tatuaje. Fue un descubrimiento casual. La tenía por casa, llegué rozadita porque las bandelettes del Carrefour no me hicieron nada y se obró el milagro. Limpié la zona, la sequé con cuidado y me puse la cremita. A la mañana siguiente casi no tenía nada. Lo mejor de esta crema es que no necesitas mucha, con un poquito basta. Gracias a esto no es pegajosa ni mancha. Como es un bote pequeño la puedes llevar en el bolso y ponértela cuando notes el más mínimo roce. La puedes encontrar en cualquier farmacia por menos de 10€.