Me ha dolido que te llame ninfomana por tener inquietudes sexuales. No es por nada, pero entre broma y broma, te acaba de llamar enferma.
No pienses en el ahora. Piensa en el futuro. ¿Te ves estando 20 años así? ¿Sin tener un sexo realmente placentero para ti?
Si le planteas la idea de que tu quieres más sexo, te llama enferma, y ya te aviso que si le dices de dejarlo, te llamará salida, superficial y buscapollas. Ya te lo aviso.
El único punto medio factible es que abráis la relación. Una relación emocionalmente monogama, sería y sana pero sexualmente abierta.
Esto no quiere decir que le digas: oye, que voy a salir y quizá me quedo en casa de Fulanito a dormir. Una relación abierta respeta siempre la sexualidad intima e individual.
Resumiendo:
Le sentaría en el sofá y le contaría tus necesidades sexuales. Que te gusta el sexo y que te encantaría disfrutarlo con él, pero que debido a la diferencia de gustos e intensidades sois incompatibles. Que no querés dejarle porque como persona te hace sentir genial y te encanta como es como hombre, pero que tienes unas necesidades que no están siendo cubiertas.
Que dado que respetas su nivel de interés sexual, quieres respetarte a ti misma también, y por ende, te gustaría poder relaciones sexuales con otras personas, ajenas totalmente a la relación y a vuestro círculo de amigos. Que esperas que entienda que no tienes intención de estar así toda la vida. Que no quieres ponerle los cuernos, pero tampoco quieres renunciar a algo tan divertido como el sexo.
Estate segura de que no le va a gustar la idea. Y que alomejor te monta un pollo. Pero aquí te digo una cosa, puede decirte que no le gusta la idea, pero dado que tienes unas inquietudes que el no entiende, no tiene derecho a atarte en corto, pero ojo, que tu tampoco tienes derecho a ponerle los cuernos.
Lo mejor es que le digas lo que te he comentado. Que ante todo quieres hacerlo de forma consensuada.
Ahora bien, si no se baja del burro eso te señala que le importa 3 mierdas tus insatisfacciones. Y si hoy le importan una mierda, y además te llama ninfomana en toda la cara, la puerta es muy grande, querida.
A veces, dejar una relación que no te completa es una preciosa manera de respetarte a ti misma y a tu cuerpo.