Mi suegra es especialita para todo, pero sobre todo a la hora de demostrar algo de afecto.

Lleva unos meses que siempre que hacemos alguna comida familiar, me tiene que presentar con mi nuevo apodo “chochona”

Se ve que para ella es algo bonito y precioso para demostrarme que soy su nuera favorita, pero a mí me suena a insulto.

No se corta ni un pelo, me coge del hombro y le dice a la persona que tenga delante: “esta es mi chochona.”

¿No te parece la palabra más horrible del mundo?

Si lo piensas bien, “chochona” es despectivo y parece que te diga que tienes el papo grande. Solo me faltaba que lo hiciera por eso, la verdad.

Otro significado puede ser el de vaga, como que no haces nada con tu vida. Si van por ahí los tiros, me cabrea más que lo de antes mencionado, porque sabe de sobra que curro y estudio como una puta desgraciada.

Quién no ha escuchado alguna vez eso de “muñeca chochona.” De verdad que no sé a qué hará referencia, pero cuando lo oigo, me imagino las muñecas esas hinchables feas de narices con la boca abierta y la apertura en los genitales. Como me llame así porque son parecidos razonables, me da un parraque.

 

Vamos, que no se salva ni una de las connotaciones que me pasan por la mente.

A esto súmale que siempre que lo dice, me toca el mondongo. Por si no sabes a qué me refiero, el mondongo es esa parte baja de la barriga que suele hacer un plieguecillo y sobresale.

¿En serio cree que me gusta escucharlo? ¿Puede llegar a pensar que es algo bonito y que me siento querida y valorada?

¿Soy la única que piensa que lo hace con mala leche?

Mi novio dice que seguramente es porque ella solo tiene hijos y siempre ha querido tener una hija. Según él, ellos son sus pichitas y ahora yo la chochona.

Me da igual que ese sea el motivo, pero no me gusta nada ni que se tome esas confianzas ni que esa sea la razón de tan maravilloso nuevo apodo. Además, ella tiene cuatro hijos, tres tienen novia y se ve que el mérito para ser “chochona del año” solo lo tengo yo.

Soy tonta y no le he llamado la atención, pero al próximo “chochona” le pienso decir que ella para mí también lo es, a ver qué le parece.

 

Anónimo