
Dio la casualidad de que él también era partícipe de las bromas y me invitó a un cigarro. Salimos a fumar, entre risas, me comió la boca.
Por LoversizersEn una de sus visitas, cuando yo tenía ya 22 años, unas amigas y yo nos cogimos una habitación de hotel en el mismo donde ellos se alojaban.
Por LoversizersY allí en la cabina de mi curro, me empotró contra la camilla y pegamos el polvo de la vida.
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