Está claro que ahora hay cosas más importantes en las que pensar, pero por eso mismo, alguien debe pensar en frivolidades y hacerse preguntas absurdas y divertidas por los demás.

Porque también es bueno que nos distanciemos un poco de tanta negatividad, preocupación, miedo y frustración, durante unos segundos, unos minutos o incluso unas horas…No te preocupes, cuando quieras puedes volver al choque con la realidad y todas esas noticias que te merman un poco el espíritu. Esas no se van a ir a ningún lado, ¿no ves que están en cuarentena?

Pues mi “rubireflexión” del día es: El sujetador: ese pequeño opresor …

sujetadores

Que yo he leído mucho últimamente sobre qué debes hacer para teletrabajar mejor, cómo crearte un buen espacio, rutinas para estar organizada etc, etc…¡Pero! Aparte del dúchate y vístete, ¿qué sabemos del dress code de la ropa interior? ¿Alguien tiene alguna referencia al respecto? ¿No me digáis que todas os ponéis el sujetador para estar en casa…?

Si es así, por favor quiero saber cuál es vuestro secreto, porque vamos ¡yo estoy encantada de no tener que ponérmelo en todo el día! Y ahora, pues puedes ir a comprar cuando toque sin él, así tan feliz, a lo “indigente style” que nadie te va a cuestionar.

Pero yo me planteo…¿Qué va a pasar después de este confinamiento? ¿Seremos capaces de colocarnos el sujetador de nuevo? Que yo me veo llorando, de verdad, esto nos puede causar un trauma a posteriori que no deberíamos de menospreciarlo.

Yo que sé, se me ocurre ir pensando en tomar medidas al respecto, en plan tabla de ejercicios. Así como una adaptación para cuando volvamos a tener que llevarlo casi 24/24 …

sujetador

Por lo pronto disfrutar una semanita “suje-free” no está nada mal, si acaso alguna camisetita de licra que te recoge un poco, pero te permite seguir siendo un alma libre. Y ya cuando se vaya acercando el momento de volver a socializar…pues deberíamos empezar poco a poco.

El primer día unas horas, y a ser posible con alguno deportivo, una cosa como ligerita, o una bralette sueltecita, no de esas que se enganchan al cuello y te tiran tanto que acabas con el síndrome del latigazo cervical sin salir de casa…

Después, pues puede que lo mejor sea continuar con aquellos sin aros y que estén dados un poquito de sí…que no tengas que hacer una tensión inhumana para abrochártelo.

¡No te vayas a la primera de cambio al push-up, que el choque puede ser muy drástico y quedarte secuelas de por siempre!

sujetador

Antes del gran salto, te arriesgas a ponerte uno con aros todo el día en casa, a ver cómo se desarrolla el asunto y cuánto tiempo aguantas con él. Si ves que es mucho tiempo vuelve al paso anterior y date algo más de margen, que Roma no se hizo en un día…

Y ya, cuándo te sientas preparada, ahí vas con todo, arrancas del tirón con el push-up más guay que tengas y ya estás preparada para salir a la calle con tu suje bien puesto y tu cabeza bien alta (entre otros) , lista para aguantar tus 24/24 con el suje como si nada hubiera pasado… ¡ja!

Esa es la expectativa…la realidad será que estaremos deseando llegar a casa para quitárnoslo, sino habrá quien lo haga en el baño de la oficina antes de salir, en el coche de vuelta a casa o en el ascensor ¡porque ya no lo aguanta más!

quitarte el sujetador

Conclusión: «Disfrutemos mientras podamos de este privilegio que la cuarentena nos ha dado, porque el día de salir se acerca y tendremos que volver a la calle con todo bien agarrado»