Buenas noches a todas. He descubierto el foro hace muy poco y me apetece contaros mi historia… Puede que sirva para que no caigais en mi error.

Hace un par de meses conocí a un chico por tinder, desde el principio hubo mucha conexión así que no tardamos en darnos los teléfonos.

El chico en cuestión se llama J.
Al segundo dia ya me pidió hablar por videollamada y no se muy bien por qué pero acepté.

Todo fue muy natural y muy fluido, en ningún momento se creó un silencio incomodo ni nada por el estilo.
Asi que poco a poco comenzamos a hablar a diario. Nos mandabamos fotos, nos contábamos cosas de nuestras familias, del trabajo,nuestras aficiones, relaciones anteriores… Incluso me habló de sus hijos y me mandó fotos de ellos.

Al principio me pareció que estaba demasiado entregado… Que si echo de menos hablar contigo…. Que si te estas convirtiendo en alguien muy especial para mi…. Que hacía mucho que no sentía esto…
Incluso le cuestione que eso fuese asi,le dije que eso eran cosas muy fuertes y me dijo que el lo sentía asi y que aunque yo no lo sintiera igual esos eran sus sentimientos y que lo respetara.

Siempre tenia un momento para mí a pesar de tener mucho trabajo, un mensaje…una llamada en la hora de descanso,una canción que le recordaba a mi.Y claro… Comencé a creer que realmente le interesaba.
Era un chico muy carismático y con mucha personalidad,una mezcla perfecta…
guapo,aventurero, buen cuerpo, canalla pero cariñoso y atento. Presumía de ser un hombre que se viste por los pies y parecía que así era.

Me decía que queria apostar por lo nuestro, que realmente queria conocerme, que pensaba que podria llegar a ser parte de su vida, incluso contrato a una persona los fines de semana para ayudarlo en el negocio y así poder pasar mas tiempo juntos cuando viniera a verme (yo no vivo en su ciudad ). Que iba a poner todo de su parte para que saliera bien.

En ningun momento vi nada raro… No le pillé ninguna mentira y todo parecía muy real y sincero. Me dio tanta confianza que llegamos a contarnos cosas muy personales, incluso nos mandabamos fotos subiditas de tono y nos contabamos aspectos muy muy intimos, la atracción era muy fuerte.

Se volvió parte de mi día a día y sin darme cuenta me habia ilusionado mucho con él.
Cuando por fin tuvimos la oportunidad decidimos pasar el fin de semana juntos. Los dos estabamos muy nerviosos por conocernos en persona porque ahí es donde realmente se decidiría todo, pero teniamos muchas ganas.
Cuando nos vimos por primera vez fue mágico, no podria describirlo con palabras.
Esos primeros besos… Abrazos eternos… Olernos… Una sensación increíble,nos mirabamos y no nos lo creíamos . No se nos quitaba la sonrisa de la boca,como dos crios.

El fin de semana juntos fue de película, hubo de todo… Sexo, cariño, complicidad, risas,mimos, confidencias, nos contamos mil cosas, todo fue muy natural, como si nos conociéramos de hace tiempo.
Ni nos lo creiamos, habiamos arriesgado mucho decidiendo pasar un fin de semana juntos asi de primeras, con alguien a quien no has visto nunca.

Pero todo salió genial, salimos a cenar a dar un paseo, cafés, peli y helado nos dio para mucho. La realidad fue mucho mejor que cualquier cosa que hubiera imaginado.
Él se fue el lunes por la mañana porque quiso aprovechar hasta el último momento para estar juntos asi que a las 6 de la mañana se despidió de mi.
En cuanto llegó a su ciudad me escribió para avisarme de que ya había llegado y de que el camino fue bien.
Nos dijimos lo bien que lo habíamos pasado y nos dimos las gracias uno al otro por hacernos pasar unos días increíbles.

En ese momento os podéis imaginar cómo me sentía… Pensaba que era muy afortunada porque estas cosas no pasaban y él tenia todo lo que buscaba en una pareja.

Ese mismo día apenas hablamos pero yo no le di importancia ya que supuse que tendría mucho trabajo por llevar varios dias sin ir al negocio y ademas iba a ver a sus niños.
Por la noche le pregunté q tal le había ido el día y hablamos algo, pero muy poco y al despedirse lo noté raro, no lo hizo como siempre.

A la mañana siguiente le di los buenos dias de manera cariñosa y le pregunté si todo iba bien. Su respuesta fue… Todo bien.
Así, a secas, nada mas. Ni como has dormido, ni t echo de menos, ni que vas a hacer hoy… Nada.

Pasó todo el dia y no recibí ningún mensaje, ahí ya sabía que algo pasaba. Nunca pasaban mas de 2horas sin que supieramos uno del otro.
Asi que a las 9 de la noche recibí un mensaje que decía…. No t preocupes estoy bien, me he caido con la moto a mediodía llegando al trabajo y salgo ahora del hospital pero no t molestes en llamarme.
¿Comoooo? No entendí nada.

Le pregunté qué había pasado, si realmente estaba bien, que porqué no podía llamarlo.
Y al cabo de un rato y no recibir respuesta lo llamé, pero no lo cogió.
Me mandó un último mensaje diciéndome que por favor no lo llamara más , que daba igual.
No os podéis imaginar como me sentí… No entendía nada de lo que estaba pasando, se me pasaron mil cosas por la cabeza pero decidí no insistír más.
Pasó una semana y decidí bloquearlo.
Había tenido tiempo de sobra para explicarme que pasaba,incluso si resultó que no fui lo que esperaba, habia otras formas de hacer las cosas.

Ayer por casualidad una amiga lo vio de nuevo en tinder.
Asi que si veis un tal pirata o julio, ojito… Porque la única justificación lógica que se me ocurre es que no es la primera vez que lo hace.

Se que no soy ni la primera ni la última a la que le han ocurrido este tipo de cosas, pero quizá puedo ayudar a alguien a que no se la juegue este sinvergüenza.
Por suerte tengo una buena autoestima y esto se quedará en algo de lo que aprender.
Pero eso no quita que en algún momento te cuestiones si la culpa es tuya, si has dicho o hecho algo para que esto pasara.

En fin… Siempre hay una primera vez para llevarte una decepción y esta ha sido la mia.

Gracias por leerme. Un saludo a todas.