¡Muy buenas! Y feliz San Juan.
¿Qué tal? Yo ahora mismo estoy tratando de tomarme las cosas con filosofía pero aún así, me siento un poco fastidiada (se me pasará).
Veréis, Tinder es una app que aquí conocemos bien, y sabemos que lo normal no es encontrar pareja (hay gente que sí, pero creo que estadísticamente no es lo normal). Pues bien, siempre voy con esa idea y de hecho, a pesar de que soy más de relaciones serias, también he tenido mis follamigos y ha salido bien, pero claro, es que no llegué a enamorarme de ellos. Aunque tampoco es cierto que tenga un botón de apagar y encender sentimientos.
Pues bien, la cosa es que conocí a un chico en Tinder que me dijo hace ya un tiempo de quedar. Yo iba a quedar con él pero vi que no me agregaba al whatsapp y que me hablaba muy de vez en cuando. Al final, resultó que tuve un mal día, le di una excusa y le dije que mejor dejarlo para la semana que viene. A él no le importó y a mí me dio tiempo a reflexionar un poco, porque llevo una racha un poco mala con los chicos y estoy un poco más sensible de lo normal.
Cuando quedamos, resulta que el chico me encantó, cosa que no me esperaba. Tiene buena conversación, me río con él, él se ríe de mis tonterías, etc. Pero no intento besarme (yo pensé que lo mismo es de los que prefieren esperar un poco más, por lo que tampoco me lancé) y se despidió con un abrazo (que me resultó un poco raro, pero bueno). Aún así, en la cita me contó que él trabaja mucho, que no está muy pendiente del móvil y que por eso suele contestar tarde y que lleva poco tiempo donde vivo y cuando puede, pues hace un par de visitas culturales. Así, me dijo de quedar la próxima vez para ir a algún museo, y yo lo acepté.
Volvemos y seguimos hablando por whatsapp. Hasta que me propone que yo vaya un día a estudiar a su casa. «La idea sería» que yo me quedara en su casa estudiando mientras él trabaja (él teletrabaja y vive solo). Y bueno, claro que me apetece ese plan pero me tengo que quitar la idea de la cabeza de que él me vaya a ver como algo más en un futuro, o eso es lo que creo. Aún así, me parece un poco raro porque, a pesar de que ya sabemos lo que significa ese mensaje, ¿de verdad un descanso en el trabajo da para tanto? Yo nunca he teletrabajado pero me imagino que, en esas circunstancias, puede que sí.
Total, que al final le dije que sí, él me confirmó que sería la semana que viene y yo le dije que estupendo y le pregunté por su tarde. Eso fue ayer por la tarde y todavía no me ha respondido. ¿El resultado? Ahora estoy escribiendo este post, sintiéndome como si fuera tonta, pensando que siempre estoy a tiempo de retirarme y acordándome de lo que dijo mi amiga, que siga conociendo chicos. Luego, también me pregunto por la otra quedada, la del museo, y me pregunto nuevamente por sus intenciones. Pero me acabo de acordar de que él visitó un museo de arte contemporáneo y que no entendió muy bien y yo pude explicárselo (porque tengo estudios culturales). ¿Será que quiere una guía de turismo con quien pueda echar un polvo de vez en cuando?