Pelos. Los pelos son esa cosa que te sale por todo el cuerpo y que no pasa nada si son rubios, pero como sean negros, no importa que sean cortos o largos que siempre te saludan al mirarte al espejo.
Tengo pelos, tengo pelos en las piernas, en los brazos, en las cejas y en el chumino, pero sí señores, también tengo pelos en la barbilla, en los dedos de los pies, en el ombligo, en los pezones, dentro del culo y alguno que otro que me sale alborotado por partes que ni yo entiendo y claro está, no pueden ser discretos, tienen que salirme negros, duros y que pinchen porque así le dan más alegría a mi cuerpo. Yo soy de las mujeres que les gusta depilarse porque me siento más cómoda, pero tengo que admitir que me gustaría ser más valiente y mandar a tomar por culo, las pinzas, la cera y las cuchillas porque como todas sabemos cuando no te ves uno te ves otro, y te miras en el espejo y no tienes pelos en la barbilla y de repente al día siguiente allí están que miden como dos centímetros y te saludan con alegría. Y porque os digo eso, porque chicas tenemos que respirar y saber que no somos las únicas que tenemos pelos, que si tienes lianas dentro del culo, las tienes tu y el 90% de la población femenina, que si tienes el bigote de Salvador Dalí, también lo tengo yo y tu vecina y que si un día te da por acariciar tus tetas y te ves allí cuatro pelos que no entiendes porque te han salido pues chica, porque a muchas mujeres nos salen, y no pasa nada ¡Hay que normalizar la situación! Y después de entender que los pelos están y estarán tú eres la única en decidir que hacer con ellos, porque es tu vida, es tu cuerpo y como digo yo son mis pelos.