Hola loversizers!

Hace unos años tuve una relación de unos tres años con el que era mi novio, llamemosle X, en la que discutíamos constantemente. Yo me volví loca porque veía cosas que no me gustaban (no contaba conmigo para muchos planes, entre ellos salir de fiesta practicamente todas las semanas y si por alguna razón coincidíamos, cosa que pasó contadas veces, me evitaba. Pareciera que se «avergonzaba» de mí en algunas situaciones. Esto por supuesto siempre lo negó, pero el run run en mi cabeza me carcomía). Los dos hicimos cosas mal, pues yo, con cada cosa que él hacía y no me gustaba, me volvía más posesiva y obsesionada, lo cual fomentaba que él me ocultara cosas para ahorrarme el disgusto. inspeccionaba sus RRSS, llegué a mirarle el móvil (y encontré cosas que no me gustaron)… todo muy tóxico. Rompimos y volvimos varias veces hasta la definitiva en la que le dejé, pues abrí los ojos y asumí que había allí muchas cosas que no me convenían, y además yo me sentía confiada y muy agusto conociendo a gente nueva.

Actualmente, llevo casi dos años con un chico, llamemosle Z, que es todo lo contrario a X. Desde el minuto 1 es atento, soy amiga de sus amigos, siempre hacemos planes en conjunto, me tiene en cuenta para todo. Qué más se puede pedir. No vivimos en la misma ciudad pero por suerte podemos vernos bastante.
Y sin embargo, siento como si algo me perturbase esa tranquilidad. A menudo me siento obsesiva, «con la mosca detrás de la oreja». Es como si yo misma buscara siempre el resquicio para echarle cosas en cara. Supongo que estoy alerta por si me volviera a pasar lo mismo que en la relación anterior. Y claro, a veces pasa que si Z hace algún plan sin consultarme me suele sentar mal y me lo tomo como un «ataque». Busco la forma de que me moleste, de justificar que está haciendo algo mal (estoy escribiendo esto y ya me choca…).
Tampoco sé muy bien como gestionar los enfados, más allá de quedarme callada y molesta. Cuando él pregunta e insiste, soy capaz de soltarle mi problema, pero de malas maneras y de forma brusca. Como digo, este chico es un cielo y esta situación, por suerte, ha pasado muy pocas veces… además ya me va conociendo y yo le he contado mis preocupaciones así que es bastante comprensivo.
Pero me preocupa no ser madura, tener fantasmas del pasado, no ser capaz de gestionar los enfados, ser posesiva y controladora… sobre todo de cara a una convivencia futura.

Sé que me vais a recomendar ir a terapia, quizás sea lo mejor, lo haré en cuanto económicamente pueda permitírmelo, pero mientras tanto me gustaría leer un punto de vista externo y testimonios o consejos de alguien que haya pasado por lo mismo.

Gracias de corazón! Espero haberme expresado bien, es dificil resumir años y «traumitas»…