Querida tocaya, querida Laura
Hoy se me ha roto el corazón cuando , en la televisión, han confirmado que el cuerpo encontrado a 5 km de la casa de El Campillo (Huelva) que alquilaste era el tuyo. Se me rompe el corazón por pensar que un desalmado o desalmada ha decidido por ti, por tu vida. Porque tienes 26 años. Porque se ha detenido tu proyecto de vida, porque no podrás envejecer junto a tu novio o familia. Porque te han negado la oportunidad de tener hijos e hijas, si querías, te han negado la oportunidad de ser feliz, de ser persona, de envejecer. Te imagino llegando con tus maletas cargada de ilusiones, aunque fuera una sustitución, tengo amigos profesores y sé que todo suma…Lo que te ha ocurrido no tiene nombre. Es completamente injusto e indignante. Que una chica joven, en 2018, no pueda salir sola de casa a pasear o a correr sin el miedo metido en el cuerpo. Sin riesgos de que la asesinen o la violen. Querida Laura, espero que descanses en paz y que las personas que tienen la obligación de investigar y perseguir a tu asesino, no descansen hasta meterlo entre rejas para siempre. No es justo que, un desgraciado haya truncado tus sueños e ilusiones y haya destrozado a tu familia, a tu novio, amistades y entorno.
Hay muchas mujeres que hoy mandamos un beso al cielo, o donde quiera que estés, Te honramos recordándote, poniéndote nombre, porque no eres un número más, eres Laura Luelmo y tenías todo el derecho a vivir una vida larga. Se me rompe el corazón y el alma, siempre albergas la esperanza… y aunque no soy creyente, «rezaba» para que aparecieras viva. Despúes de lo que te ha ocurrido, lo sucedido con Gabriel o con Diana Queer, piensas que el mundo se va a la mierda, que hay mucho malnacido y malnacida por ahí suelto y muy poca o nula proyección para las personas más vulnerables. Solo recupero la esperanza mirando a los ojos a mi hija de un año, que me dicen que hay esperanza.
Querida Laura, hoy tienes un montón de corazones de mujeres acompañándote, no estás sola, nosotras lucharemos por ti y no dejaremos que seas un número más ni que caigas en el olvido. Desde el Norte, todo mi cariño para ti, guerrera, y el pésame para tu gente.
Un abrazo grande, bonita,
Una tocaya tuya.