Ayer fui de tiendas teniendo la talla 50. ¿Queréis saber lo que me compré? Sigue leyendo…

NADA.

¿No te sorprende? Pues deberías, porque llevo más de 6 años comprando en tiendas físicas teniendo una talla grande y es ahora cuando estoy teniendo problemas para encontrar algo.

Hace 6 años el mercado de las tallas grandes estaba mal fatal. Tenías que acudir a las tiendas online o a los mercadillos de barrio para poder encontrar algo decente.

Aprendiste a ingeniártelas para saber lo que sí te queda bien y lo que te queda mal solo con mirar cómo le quedaba a la modelo de la talla 44. Teníamos las tiendas típicas: Evan’s, Dorothy Perkins, New Look, Primark… y, de repente, empezaron a aparecer tiendas muy modernas y actuales que nos hicieron muy felices como Asos y Forever21.

No sé vosotras, pero mi sueldo se iba en Asos y Forever21. TODO, absolutamente TODO lo que sacaban a diario me molaba un rato largo. Las prendas eran IGUAL que las que llevaban mis amigas de la 38 y los precios eran los mismos que podía encontrar caminando por el centro y entrando en cualquier tienda al uso.

Lo mejor llegó cuando Forever21 aterrizó en España poniendo dos tiendas físicas en Barcelona y Madrid. Entre Forever21, HM, Ms Mode y Primark podía irme «de tiendas» como el resto de mis amigas y salía con bolsas cargadas de monerías. Después apareció Violeta y la cosa mejoró, ya teníamos varias tiendas físicas a las que acudir con una talla superior a la 48.

Las tallas grandes estábamos de fiesta mayor porque teníamos shopping por un tubo (sobre todo online). Podías escoger en más de 20 tiendas e ir vestida como una diosa y, lo mejor, encontrar tu propio estilo y defenderlo como la mejor. Pero hace unos dos años que la cosa ha empezado a decaer de forma muy bestia.

Asos ya nos dio un susto hace unos años dejando de hacer la ropa molona a la que nos tenía acostumbradas, parece que cambiaron a los diseñadores y la cosa decayó, pero tras una colección terrible volvieron a darnos más alegrías que nadie. La cosa duró poco, un par de temporadas y volvieron a lo que hoy es Asos Curve, un sitio ideal para comprar básicos caros, vaqueros con los que nunca aciertas tu talla, abrigos sin forma y de mala calidad, y bañadores caros que no tienen sentido alguno. Seguimos comprando allí, pero reconocemos que solo cuando necesitamos algo muy concreto como vaqueros (siguen siendo de los mejorcitos) y algún vestido maravilloso que cae como la lotería.

Con Primark ya no podemos contar. Hace más de 4 años que encontrar algo es misión imposible… todavía recordamos con nostalgia aquellos viajes a Londres en los que cargábamos la maleta solo con ropa de Primark. O las tardes yendo a Barcelona o Madrid y comprando un vestido de cada para pasar el verano. Ahora mismo las tallas ya no se entienden, encontrar una 48 es misión imposible y cuando la encuentras no es real por mucha ampliación de tallaje que dicen haber hecho. Primark es genial para la decoración de hogar, los pijamas, accesorios y chorraditas de belleza.

Pero mi susto fue ayer al entrar a HM y ver que mi corner querido había quedado reducido a la mierda más apestosa del mundo. De tener hasta 15 burras llenas de ropa ahora solo quedaban 3, el resto eran restos de lo que la gente se pide online y devuelven. «Una menos» pensé, y me fui pensando que quizás en un mes cuando se haya acabado la locura de las rebajas todo volverá a la normalidad.

Me fui directa a Forever21 para aliviar mis penas con el fallido HM y mi cara era un poema. Entré en la tienda y vi lo mismo que en HM, nos han reducido a cenizas y ahora solo tenemos un tercio de lo que antes era el espacio plus size. Lo que había parecía de broma, muy de disfraz (ya lleva tiempo así pero siempre encuentras alguna cosita). Intenté probarme algo pero no habían ni tallas, así que desistí.

Quise hacer una última intentona en Violeta y lo único que encontré es una tienda que parece que vende ropa a señoras mayores. Nada de la web, nada ponible y con unas dependientas bastante rancias que te miran mal por pedir una talla 54.

En MS Mode no tuve más suerte, y es que MS cada vez que intenta ser valiente y realizar una campaña más moderna parece que seguidamente se hace caca y vuelve a la ranciedad de sus prendas serias y tristes.

SimplyBe ya hace un par de años que dejó de enviar la ropa a EUROPA. Torrid tiene unos gastos de envío imposibles. Modcloth dejó de enviar a Europa. New Look cada vez tiene menos variedad. Dorothy Perkins y Evan’s cada vez tallan más pequeño y la calidad es peor.

Seguiría con el resto pero vosotras mismas sabéis que ahora mismo es complicadísimo comprar ropa bonita a pesar de tener muchas tiendas a nuestro alcance.

Me dio por comparar el mundo tiendas de talla grande con el mundo plus size.

En estos 6 años hemos conseguido muchas cosas: somos mujeres body positive, feministas, que alzan la voz reclamando sus derechos y su sitio en el mundo. Pero que, a la vez, sufrimos ataques más fuertes de machismo, más gordofobia, menos tolerancia, más exigencias y, encima, sin tener una sola marca de moda que nos represente como nos merecemos.

Esperemos que todo vuelva a dar un giro y recuperemos la ilusión de entrar en una tienda y querer entregar como ofrenda nuestra VISA y llevárnoslo todo a casa.