Estaréis conmigo en que uno de los inventos gastronómicos más maravillosos del mundo es la carrot cake. Es un plato de los dioses, pero claro, no porque lleve zanahoria se libra de ser un plato bastante calórico y poco recomendado (lleva azúcar, mantequilla, queso graso y harina blanca), si no es para consumo puntual.
En Weloversize ya os enseñamos una receta estupenda para haceros una carrot cake sanita, apta para las que cuidamos nuestra alimentación a tope, sin renunciar a sabores ricos y sobre todo, al dulce. Pero hoy he querido enfocar la receta a algo más rápido: tortitas fit de carrot cake. Perfectas para desayunos express o para meriendas antes de entrenar. Además, son altas en proteínas, por los que su efecto saciante es estupendo.
Aquí va la receta:
Ingredientes:
– Harina de avena 30 gramos (yo uso la de sabor cookies de Max Protein)
– 1/2 zanahoria picada
– 1 huevo (yo a veces, suelo usar un par de claras para que me cunda más y poder tomar huevos en otras comidas del día)
– Canela a tope
– 1 cucharadita de edulcorante líquido
– 2 cucharadas soperas de queso batido 0% (yo uso el de Hacendado o el Quark)
– 1 cuacharadita de café de levadura
Elaboración:
No tiene mucho misterio. Sólo hay que mezclar bien todos los ingredientes en un bol, pasar por una sartén con un poquito de aceite ¡y listo! Aunque si quieres que queden esponjosas a tope, hay que batir muy bien la clara (o claras) al punto de nieve, hasta que se pueda casi coger con la mano en bolitas y mezclarlo posteriormente con la yema y los demás ingredientes. Pero eso ya va en cuestión de gustos.
Podemos añadirle los toppings que más nos gusten. Yo suelo ponerle una cucharadita de queso batido fresquito 0% con canela y nueces, sirope de caramelo de Walden Farms (os hablamos de esta marca aquí) o una onza de chocolate negro 0% fundido. ¡Ñam!
Receta sacada de: @loveatinghealthy
