Porque irse de vacaciones con el/la churri es genial, y hasta en familia. Pero unas vacaciones como Dios manda con las amigas, eso no hay quien lo pague.

 

– Por las anécdotas absurdas que luego os darán para horas y horas de whatsapp. Memes incluidos que circularán durante años.

– Porque siempre hay alguna que lo necesita como agua de mayo después de un despido, una ruptura o algún problema familiar. Y esas vacaciones rodeadas de tus amichis son salud.

– Si tienes pareja, me parece fundamental aparcarla unos días e irte a crear tus propias vivencias para echarle un poco de menos y luego tener cositas que contarle a la vuelta. Esos whatsapps de ‘te echo de menos pero me lo estoy pasando genial’ son una gozada.

– Porque son viajes que te recargan las pilas y que te hacen desconectar del mundo.

– Porque no hay nada mejor en el mundo que esos ratitos antes de dormir después de un largo día de turista, contando chiste malos y riéndote hasta que se te escapa el pis.

– Porque es volver a ser adolescente por unos días, pero con la experiencia de una señora de bien.

– Porque con el ‘total, aquí no nos conoce nadie’ os atrevéis con locuras que no os atreveríais en vuestra ciudad. Y eso une mil.

– Porque desoxida las amistades: desahogarse, cotillear y recordar líos pasados es OBLIGATORIO en estos viajes.

– Porque con suerte si tienen tu talla, será una oportunidad estupenda para estrenar modelitos.

– Y porque las amistades, como los amores, hay que cuidarlos para que florezcan. Hazle un hueco a tus amigas en tu calendario. Ya me lo agradecerás.