A ver, queridas mías, todas sabemos perfectamente que a veces caemos en la rutina del sexo por el sexo, se bajan las ganas, apetece menos y ya casi que el follar se convierte en obligación. Hemos hablado mil veces eso de que hay que darle vidilla a la parte sexual para reanimar las ganas, probar cosas nuevas, experimentar y ese largo etc. mágico que hay que poner en practica.

Pero también sabemos todas que los productos de sexshop son más bien caros y si vas un mes con el cinturón apretado pues hay cosas más necesarias que comprar un juguete nuevo para darle al ñacañaca. Así que, para eso me tenéis aquí, para ofreceros productos súper baratos que podéis introducir en vuestra vida sexual:

1. Aceite Jhonson’s Baby. 

Conocéis el producto, os lo habrán puesto de pequeñas y, si sois mamás, probablemente ya lo tengáis en casa. Dependiendo del súper el precio varía entre 2€ y 3€. Extiende una toalla sobre la cama o asume que esas sábanas van directas a la lavadora. Túmbate o tumba a tu pareja, embadúrnala de aceite, masajea, toca, restriega, desliza… Uf… De verdad, no sabéis la magia que hacen esos dos malditos euros. Es algo super común que todo el mundo ha tenido en mente, pero que nunca nadie se lanza a comprarlo. Probadlo, por favor, ya me contáis después.

Pd: si no tenéis paraje, un automasaje con el jhonsos de los milagros también es vida pura.

2. El bote de nata 

Mira, con esto sí que ya no tenéis excusa, porque estoy segura de que se os ha pasado por la cabeza más de mil veces, es una idea que todos tenemos preconcebida del sexo y jamás nunca nadie la pone en práctica. Métele nata ahí, compañera. O póntela tú, everywhere. Pezones, chochamen, ombligo, cuello… Donde quieras que te chupe, se lo indicas con un buen caminito de nata batida, así seguro que no se equivoca. Por el módico precio de 1€ o 2€, dependiendo del sitio. Y si no te gusta la nata, pues chocolate, o queso o shushi, lo que te salga o te apetezca. Imaginación al poder. ¿Comida y sexo juntos? Joder, qué más se puede pedir.

3. Compra cuerdas

Te vas a la ferretería de la esquina, al chino, a los 20 duros, al todo a 100 o al Leroy Merlin. Por menos de 3€ las tienes. Te compras unas buenas cuerdas y atas a la cama a la couple o dejas que te aten a ti. Coges un pañuelo que tengas por casa, ojos también fuera, pones algo de música y ale, a hacer y deshacer como te apetezca, mientras el otro se entrega a la dulce tortura de solamente dejarse hacer. Si a este plan le sumas también el bote del Jhonson’s pues ya apaga y vámonos.

4. Fruta para el chocho 

Esto os podrá parecer una locura, una guarrada o yo qué se qué. Me lo explicó una americana súper loca de la cabeza que había probado de todo. Ella compra frutas: fresas, kiwi, plátano, cerezas… Todo que esté bien duro y poco maduro, para que no se deshaga y sea eso zumo in the bed. Las lava bien, bien y  luego coge las piezas de fruta, se las pasa por el chocho y se las come mientras mira profundamente al otro o se masturba con ellas y luego se las ofrece para que se las coma la otra persona. Esto es para ser bien de atrevida, diosa y sensual, o sea, todas deberíamos probarlo. Luego dice que te comen el chocho y sabes a país tropical. Yo lo he probado y de antemano puede parecer un ‘psché, sin más’, pero creedme que no, lo que le pones a la otra persona mientras te masturbas, le provocas, te comes la fruta y solo miran es impagable.

5. Hielo 

Coge un buen cubito de hielo, métetelo en la boca y comienza a pasear tu lengua congelada por su cuerpo. Empieza por el cuello, pasa a la oreja, baja a sus clavículas, rodea sus pezones, sigue bajando hacia el ombligo, pasea el hielo por toda su cintura, no se te ocurra bajar todavía al tema, de hecho es mejor que pases directamente a la cara interna de los muslos, mójalos bien con el reguero de agua helada, mírale fijamente mientras caen unas gotas sobre su sexo y muy lentamente entonces te acercas, sácate el hielo de la boca y practica sexo oral como en tu vida, nena. Y si lo que quieres es que te lo practiquen a ti, le pasas el artículo y le dices ‘quiero un 5 para cenar’. Y que se ponga manos a la obra.

Pd: Este no tiene ni precio, mete agua al congelador y aparcao.