El Slugging, la rutina facial que se viraliza por sus increíbles resultados y su bajísimo coste

 Somos muchas las mujeres que, cuando necesitamos una crema facial, andamos buscando, sobre todo, productos que nos hidraten la piel en profundidad, ya que, es sabido, que una piel bien hidratada es sinónimo de poros cerraditos, piel más jugosa, elástica, confortable y con menos predisposición a las arruguitas, líneas de expresión, descamación, etc.

 

Ésta es la finalidad del Slugging, una técnica proveniente de Corea del Sur que, aunque no es novedosa, es ahora cuando se ha hecho viral arrasando en internet. Consiste en aplicar un agente oclusivo (el más usado es la vaselina) sobre los demás productos que utilizas a diario en tu rutina de noche para el cuidado de la piel, con el fin de sellarlos.

Al aplicar este agente oclusivo, lo que hacemos es favorecer la hidratación de la capa más externa de la piel con nuestra propia agua corporal proveniente de las capas más profundas, evitando así, la pérdida de agua y haciendo, además, que los productos que nos pongamos, tengan un mayor efecto.

 

El slugging, en sus inicios, lo popularizaron también las coreanas como un remedio para tratar el acné y, actualmente, mucha gente sube videos a las redes recomendando la vaselina para tratarlo.

Chicas, hay que tener mucho cuidado con esto. Es cierto que las pieles grasas, pierden más agua que otro tipo de pieles y necesitan una mayor hidratación.

Pero al aplicar una capa de vaselina en pieles grasas o con tendencia al acné, lo que podemos provocar al sellarla e impedir, por tanto, que “respire”, es una obstrucción de los poros, aumento de sebo y una proliferación de bacterias, empeorando con todo esto nuestra piel. Lo mejor, si tienes la piel muy grasa y con tendencia al acné, es que escojas productos específicos para tratarla ¡no vayamos a liarla!

Para las pieles normales y secas, la verdad es que esta técnica sí que está teniendo resultados muy buenos, pero tampoco hay que abusar. No hay una regla fija, pero lo ideal sería aplicarla una o dos veces por semana si no tienes la piel ni muy grasa ni muy seca, o varios días seguidos si la tienes muy seca, hasta que la sientas humectada.  Si tienes la piel grasa, pero no en exceso, con una vez de vez en cuando sería más que suficiente. Puedes probar una vez cada diez días y ver cómo responde tu piel.

 

En cuanto al modo de aplicación, hay que empezar limpiando perfectamente la piel, porque, si dejamos restos de impurezas, como bacterias o suciedad, se introducirán más profundamente.

Una vez tengamos nuestra piel como una patena, aplicaremos nuestro sérum habitual. Ya que el slugging va a potenciar el efecto de lo que nos pongamos, sería ideal aplicar un sérum con ácido hialurónico para hidratar a tope nuestra piel, o alguno con vitamina C si queremos revitalizarla al máximo. Ojito con usar sérums que tengan algún componente muy fuerte (ácido glicólico, por ejemplo) porque, al potenciar los efectos con esta técnica, pueden irritarte la piel. Después, nos pondremos una crema hidratante que sea más ligerita, para que, al aplicar la vaselina, no se sobrecargue demasiado la piel.

Por último, pondremos nuestra capa de vaselina por todo el rostro. No te preocupes si sientes la piel incómoda, es totalmente normal debido a que estás usando algo muy espeso.

Por la mañana, lava muy bien tu cara para retirar todo el producto y aplícate tu tratamiento habitual.

¿Os atrevéis a probarlo?