No sé si esto es algo común, pero yo os puedo asegurar que mis amigas desaparecieron el día que fui madre.

Ni si quiera el día que fui madre, desaparecieron en el transcurso del embarazo y fue muy duro.

Os pongo en situación, yo fui la primera de mi grupo de amigas en ser madre. Es más, fui la primera en tener novio.

Cuando estábamos en nuestros 25, muchas de mis amigas no tenían pareja ni planes de tener familia, pero yo siempre super que era algo que quería hacer pronto.

A menudo solía escuchar comentarios de broma acerca de mi relación o de mis planes de futuro. El resto de mis amigas eran muy fiesteras y conocían a muchos chicos y yo, según ella, era la pringada con novio que estaba esposada.

Yo jamás me he sentido esposada ni atada, he tenido pareja pero he salido, he bebido y he disfrutado, pero los comentarios siempre estaban ahí, casi con intención de hacerme sentir desplazada porque era la única con pareja.

Cuando les di la noticia de que estaba embarazada, todas se alegraron mucho, pero más allá de esa alegría no sentí que ninguna de las que habían sido mis amigas me acompañara en el proceso.

Los planes de amigas eran normalmente salir por la noche para bebér y ligar. Y yo, obviamente empecé a proponer otro tipo de planes.

No podía beber y según el embarazao avanzaba cada vez me apetecía menos pasar 7 horas dando botes en una discoteca. Me dolió mucho que ninguan de ellas se amoldara un poco a mis nuevas necesidades y que me dejaran de lado por completo cuando empecé a no poder salir con ellas por la noche.

No os exagero si os digo que mis amigas desaparecieron de la faz de la tierra. Yo solía escribir en grupo y proponía quedar a tomar una birra en una terraza por la tarde (aunque yo tomara un café). Pero la tónica general era dejarme en visto y no contestar.

De vez en cuando tenía contacto con alguna, pero eran comentarios fugaces y frívolos. Supongo que ellas estaban en su mundo de ligoteos, de tíos, copas y vestidos ceñidos y yo pasé a un segundo plano. ¡Qué coño segundo! Me borraron por completo.

En el transcuro del embarazo mis amigas desaparecieron. Cuando dí a luz varias de ellas me llamaron para felicitarme y con una de ellas, pude hablar un poco más tendido y profundo.

Le pregunté a ver qué estaba pasando, porque ya no querían quedar conmigo y le dije que no entenía porque mis amigas había desaparecido.

Ella me dijo abiertamente que no querían estar conmigo porque siempre estaba hablando de mi bebé, ya no podía salir por la noche y que siempre estaba cansada. Que ellas salían por la noche a pasarlo bien y a ligar y que mi vida ya no encajaba con ellas, literalmente me dijo que yo era una carga.

Después de soltarme aquello me dijo «¿Pero me entiendes verdad? No te enfades, pero esque ya no eres una amiga sexy»

Pero me lo dijo con un tono completamente frío y sin sentirse culpable ni un sólo segundo.

Me sentí completamente desolada, porque creía que nos unía algo más que los cubatas de las discoteca, pensaba que eramos amigas que podíamos hablar de todo. Y bueno aquel día me di cuenta de que no era así. De que mis amigas desaparecieron cuando quizás más las necesitaba y que encima, no sentían ni un pequeño remordimiento por ello.

La verdad esque cuando eres mami, poco a poco haces nuevas amistades, te juntas con otras mamás y haces un nuevo círculo social.

No me costó mucho esfuerzo o tiempo encontrar a mujeres en una situación parecida a la mía con las que compartir experiencias e ilusiones, y así de la manera más tonta hice nuevas amigas.

Dos años después de dar a luz y dos años de puro silencio por parte de las que habían sido mis amigas toda la vida, una de mis amigas, la que me dijo aquello tan crudo, me llamó para darme la noticia de que iba a ser madre.

Yo le dí la enhorabuena y ella me dijo que tenía muchas preguntas, que se sentía muy sola porque las amigas le habían dejado de lado y que nadie sabía cómo aconsejarla y que se sentía muy imcomprendida.

Le entendí a la perfección, porque varios años atrás yo me había sentido de la misma manera. Le dije que todo iba a estar bien y que estuviera tranquila.

Un par de días después, esa misma amiga me escribión un wassap para preguntarme a ver si quedábamos un día para tomar un café.

¿Sabeís que hice? Dejarla en visto, y lleva en visto desde hace 14 meses.

Anónimo

 

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