CLIENTA DEL MES:  ME RECOMENDÓ TIPS PARA DEJAR DE SER GORDA

Estamos más que acostumbradas a que la gente opine de nuestro body como si fuese suyo. Una licencia que creen que tienen. Pues bien, trabajo en una tienda de ropa de niños y hay gente que cabe en esa ropa y aprovecha. Bien por ellos. Hasta aquí todo correcto.

Un día acudió una señora que se probó media tienda y adquirió un par de prendas y yo, como me quería hacer la maja, mientras le atendía le dije: “aprovecha tú que puedes y llévate lo que quieras” 

Este comentario se lo había soltado a más de una mujer y algún que otro hombre y hasta ese día se recibía con risas y sin más. La doña de ese día creía que yo le estaba pidiendo el milagro divino para adelgazar o que necesitaba una valoración de una experta en consejos de mierda.. No acabé la frase que me soltó: “Normal que no te entre con ese culo.” Sí, tengo un booty que JLo podría envidiarme si lo ve y con el que podría ahogar a cualquiera si me siento en su cara. 

Mi cara era un cuadro pero ella, que se le notaba que se le quedaba algo dentro, añadió: “tengo un amigo como tú que pesa más de 100 kilos y empezó a hacer spinning y ahora está guapísimo. Pruébalo y ya verás que dejas de estar así”

 

¡UN AMIGO COMO TÚ! 

¡DEJAS DE ESTAR ASÍ!

 

Como veía que no reaccionaba ante ese CONSEJAZO siguió contándome la historia y añadiendo tips para rebajar mi cuerpo al agrado de la señora.

Lo único que pude hacer, mientras flipaba y pensaba que no podía ser real, fue retirarme mientras le decía a una compañera que siguiera atendiendo ella. Al pagar me vio y comentó: “Oye yo solo te estaba dando un consejo. Tú verás.” La chochona encima se ofendió, tócate la peineta maritrini. 

¿Cómo puedo ser tan desagradable de no aprovechar semejante consejo? 

¿Cómo podía haber vivido casi 30 años sin hacer spinning para dejar de ser gorda? 

¿En qué estaba pensando todo este tiempo?

¿Cómo podía pasearme delante de tantos niños con ese culo y encima menearlo de esa forma? ¿Es que nadie piensa en los niños?

Odio no saber reaccionar a tiempo a estas situaciones que durante mi vida me han pasado infinitas veces. Lo bien que me hubiese quedado enviándola a la mierda gritando y delante de las 20 personas que habían en la tienda, tal y como ella lo hizo. Evidentemente, ella no lo hizo susurrando vaya que hubiese otra gorda y no escuchara sus sabios consejos.

Tengo que decir que estuve todo el día con un bloqueo importante y semanas esperando su regreso para dejarle un recadito. No volvió más. Ya se llevará la contestación el siguiente lumbreras. Aunque creo que al siguiente lo ahogo con mi culo y uno menos. ¿Votos a favor?

Ana Jota