Sí, así como lo lees. En cierto caso giraría entorno a mi vagina y mi propia vida, que bastante me entretiene. Me gustan los penes y las mentes sabias, eso no lo vamos a discutir. Y no, no se trata de querer hacerme la interesante, la difícil o la complicada. Todo lo contrario. Ahora para mí es más simple que nunca, ME GUSTA MI VIDA Y ME ENTRETENGO MUCHO EN ELLA. 

Me gusta hablar con mis amigas, leer, hacer deporte, ir tras mis sueños y para que tú (hombre) quieras compartir en ella el requisito más importante es que tú también tengas la tuya, porque la tienes. No sé a ti, pero a mi me parece una propuesta muy interesante. Mi vida es mía y yo decido cómo y con quien compartirla; y por supuesto cuando me salga de los ovarios nunca bajo tus juegos psicológicos ni de poder. Ya no me convence tanto el cuento de  «te quedarás sola» porque sola nací y así me iré, al menos eso pretendo, tendría que ser muy descabellado aquello de querer llevarte a la tumba a alguien para que te haga compañía en el más allá. Pienso.  

Digamos que tengo mucho por construir adentro y en general,  he perdido demasiado tiempo y ahora simplemente trato de ahorrarme los dramas. Prefiero eso de INVERTIR que gastar, usarme las horas y la vida para lo que tiene sentido y relevancia en la misma. 

No, no ladro, o a veces sí, cuando se trata de defender lo que me importa. Si tocas a la puerta y te dejo pasar es porque me interesas, pero que entiendas que la vida no se detiene por tu llegada. 

Hay muchos libros por leer, muchos lugares por visitar y mucha gente con la cual conversar. Puede que suene absurdo que no sea capaz de renunciar a nada pero no tengo porque hacerlo, ni tú tampoco. Me gusta mucho eso de sentir y de amar, pero si tienes prisa, quizá lo tuyo sea la salida. Te puedes ir con toda tranquilidad, sin shows ni comedias. 

 

¡Chaíto!

 

Esmeralda Zabala