Mis papás quieren engordar a mi hija

Así como lo oyen, o mejor dicho, como lo leen, me tocó lidiar con esta incómoda situación que me privó de sueño más de una noche. Para ponerlos en contexto, soy madre soltera y aunque intenté hacerlo sola y ser independiente, en algún punto me tocó aceptar que necesitaba ayuda y volver con la cola entre las piernas a la casa de mis papas a pedir ayuda, porque a pesar de lo que diga el internet, ser mamá y tener un trabajo de tiempo completo no es tarea fácil. Ya con la ayuda de ellos las cosas se me aligeraron un poco, en realidad bastante ya que ambos están retirados y pasan las tardes en casa con la niña. Ya cuando termino de trabajar, llegó yo, relevo, y así es nuestra rutina. No me va  a alcanzar la vida para agradecerles su ayuda, pero como todo, no es perfecto y les confieso que criar a los hijos con tus papás en lugar de tu pareja, es muy pero muy complicado. 

El mayor problema al que me he enfrentado hasta ahora es que, según ellos, mi hija está demasiado flaca, mi hija no come suficiente, a veces hasta me salen con que la ven pálida, débil, y que  debo darle vitaminas o llevarla al médico por estos motivos. Suena bastante dramático, ¿verdad? ¿Saben lo que también es? Absoluta y completamente falso. Mi hija está casi que se pasa del percentil normal de su peso, tiene más cachetes que yo culo, ha perdido un montón de ropa, y literal al menos una vez a la semana alguien me comenta lo “gordita” que está.  

Desde que es pequeña siempre me he preocupado por alimentarla bien, con frutas, vegetales y todo lo que manda el manual de buenas madres, y es por esto que me choca que, bajo la muy incorrecta idea de que ella está flaca, mis papás le den comida de más, y además las más calóricas posibles (papas fritas, nuggets de pollo, dulces, y la peor de todas, sodas cargadas de azúcar). 

Yo por ejemplo no consumo azúcar refinada (y no tiene nada que ver con mi peso, solo la evito porque no es nada saludable) , y antes de vivir con mis papás tampoco lo hacía mi hija, ahora en cada comida se toma una soda y yo con la vena de la sien palpitándome con fuerza porque no estoy de acuerdo con ello, y deben estar pensando lo lógico, que yo soy la madre y debería tener la última palabra, pero como les decía al principio, criar hijos con tus padres es realmente jodido, y es como si cuando vuelves a la casa de ellos, también vuelves en el tiempo y te conviertes en su niña pequeña otra vez. Eso se traduce a que ellos mandan, y así me lo hicieron saber una vez en otra discusión no relacionada con comida. 

He intentado razonar con ellos, pero como según ellos la niña está bastante flacucha, y lo hacen por su salud, no es algo negociable, ellos tienen la razón, yo estoy equivocada y ya está. 

Yo también estoy preocupada por la salud de mi nena pero en el sentido contrario, tiene 4, sus hábitos alimenticios se están desarrollando, y estoy convencida de que comemos a lo largo de nuestra adultez, según como nos enseñan a hacerlo de niños, y no quiero por nada del mundo que se acostumbre a comer como lo está haciendo ahora. 

Ah, parte importante que se me había olvidado comentar, según mi hija, sus abuelos son buenos y yo soy la mala porque ellos son súper complacientes y yo más restrictiva.  Lo conversé con unas compañeras de trabajo y según ellas es una actitud completamente normal, al parecer el lenguaje del amor de los abuelos es dar comida. 

Muy a mi pesar y pensando más en el futuro y la vida que quiero que lleve mi hija, estoy buscando un piso pequeño para irme con ella. Mis papás me seguirán ayudando en las tardes con su cuido, pero al menos, al no vivir bajo el mismo techo, recuperaré el control de dos de sus tres  comidas. 

 

Lola Lolita