En mi familia yo no he visto dar mucha teta a los bebés. Mi madre dice que a mí me dio durante unos 3 meses porque, según le dijeron en ese momento, su leche se cristalizó. Es escuchar la palabra ‘cristal’ y venirme a la cabeza la maldita MASTITIS. Bueno, y más cosas que no vienen al caso. 

Por ejemplo el culebrón. Aunque pa culebrón la maternidad.

‘Tu leche no alimenta ‘

‘Ya es agua’

‘No tienes suficiente ‘

‘Se queda con hambre’

‘Bebe cerveza y tendrás más leche’

‘Dale ya un biberón ‘

‘Por un cigarro no pasa nada’

ETC 

ETC

ETC

 

La lactancia. Esa gran desconocida. Añadiendo sacrificio a la maternidad, dolores físicos, emocionales. Restando horas de sueño. Pero también proporcionando momentazos. Miradas. Intimidad.

NO CON ESTO QUIERO DECIR QUE LAS MAMÁS QUE DAN BIBERÓN NO DISFRUTEN O SUFRAN. 

Que pena tener que puntualizar esto, cuando sólo se trata de contar lo que yo vivo. Lo que yo siento… YLoQueMeSaleDelCoño

La maternidad no es una competición. No es una batalla. No es ‘La voz’. 

Biberón VS Teta 

No están enfrentados, sino que muchas, muchísimas veces son complementarios. 

Y nadie debería sentirse culpable por venirle bien una u otra opción. Y mucho menos tiene que venir otra mamá a juzgar lo que hace otra. O cuestionar. O criticar. 

Porque hay muchas mamás que se sienten culpables por no PODER dar teta. Por no QUERER dar teta. 

 

Lo que a mí me viene bien, no tiene por qué ser lo mejor para todes. Pero sí será lo mejor para mi bebé.

 

Con mi primera niña tuve que hacer lactancia mixta al principio por bajo peso. 

En el hospital me recomendaron usar el método dedo-jeringa para no interferir en la lactancia. Así lo hicimos.

Mi hija se enganchó al pecho súper bien y súper pronto. Problemas cero. Una grieta y listo.

Más tarde asistimos a reuniones con una asociación de mi ciudad que, sin ánimo de lucro, ayudan a mamás que dan el pecho con cualquier problema, pregunta o duda que les pueda surgir. Nosotros fuimos porque queríamos saber si lo estábamos haciendo bien. La chica, que es asesora de lactancia, nos informó genial y supimos cómo hacer para ir dejando la fórmula una vez que mi niña empezó a llevar una buena curva de peso.

Finalmente pudimos disfrutar de 2 años de lactancia. 2 años en los que hemos tenido altibajos, si. Pero en general hago un balance maravilloso. Ella misma dejó de lado su teti, hasta que de repente un día… Destetada.

Y llegó el segundo embarazo…

Y el segundo bebé… Con un kilo más que ella.

Se enganchó a la teta y dijimos:

‘Qué alegría no tener la misma historia ‘

Y poco después empezamos a tragar palabras. Muuuuchas palabras, porque… MENUDA ODISEA AMIGXS.

A las dos semanas seguía con el mismo peso. Empezamos a buscar qué pasaba.

Matronas, asesoras de lactancia, pediatras, otras mamás…

Diagnósticos:

– Tengo el pezón muy grande para esa boca pequeña.

– Tengo que tomar probióticos.

– Tiene frenillo submucoso tipo 4 (No limitante… depende de quién lo valore).

– Mal agarre por falta de tono muscular e inmadurez.

– Tensión dural.

– Cólicos.

– Reflujo.

 

#HOSTIAPUTA

Este niño no trae un pan bajo el brazo. Me trae una puta panadería con su panificadora y su putamadre colega.

Total. No hemos parado de buscar. 

Entre medias, dos mastitis, actualmente camino de la tercera. Varias grietas, dos perlas de leche. Dos meses sin dormir.

Por supuesto, lactancia mixta.

Una bronquiolitis.

Muchas sesiones de fisio.

Mucha pasta gastada.

Pezoneras.

Sacaleches.

Purelan.

ETC

ETC

ETC

Y muchas mamás me han dicho:

‘Lo importante es tu bebé. Si no puedes, déjalo.’

‘Hija! Ni que la leche de fórmula fuese el diablo…’

‘Tu tomaste leche en polvo y aquí estás.’

‘¿Te crees mejor por darle teta?’

ETC ETC ETC

Y luego están las que:

‘Lo has intentado. Lo importante es que estéis bien los dos’

‘Tu sabes cuándo tienes que parar, y si lo haces, no te culpes’

‘Te escucho y te abrazo’

Por desgracia aquí no hay ningún etc.

Por suerte si hay mucha gente que me ha dicho estás 3 frases.

¡¡¡GRACIAS!!!

No sé ni cómo ni cuándo terminará mi segunda lactancia.

Lo que si sé es que seré yo quien lo decida. Pensando en mí.

Pensando en mi bebé.

 

No seamos duras entre nosotras. 

Bastante dura es la maternidad.

 

Lady Apego