Cuando llegamos a este mundo nadie nos explica una mierda. Eres una criatura completamente indefensa el día que te dejan por primera vez en el colegio, con una mochila gigante y un montón de vida por delante.

Vas creciendo y empapándote de tu entorno, aprendiendo todo lo que puedes para tener la mejor vida posible. Quizás aspiras a ir a la universidad y tener una carrera de éxito o tal vez elijes seguir un estilo de vida más familiar. Los más valientes incluso se atreven a perseguir ambas opciones.

Pero llenar las 24 horas del día de tareas a veces no nos deja tiempo para reflexionar sobre si nuestra vida está yendo por el camino que realmente queremos. Puede pasar que de que de un día para otro nos sintamos atrapadxs, con una profesión que nos disgusta o una pareja que no nos acompaña como debería. Creo que por eso me chocó tanto el libro los Cinco Arrepentimientos de los Moribundos escrito por la enfermera de cuidados paliativos Bronnie Ware.

Ware resume los arrepentimientos más comunes en personas cuya vida está llegando a su fin, que fue recopilando a lo largo de su carrera profesional. Los que más me llamaron la atención fueron los siguientes:

  1. No haber seguido los deseos propios, dejándose arrastrar por las expectativas de los demás.

  2. Centrarse excesivamente en el trabajo, dejando en un segundo plano a familia parecía ser uno de los pensamientos más frecuentes.

  3. No haberse atrevido a expresar sentimientos (OJO tanto positivos como negativos).

  4. No haber hecho el esfuerzo por reencontrarse con antiguos amigos.

Aunque tengo que reconocer que soy bastante escéptica con los libros de autoayuda y consejos este libro me pareció asequible y honesto. Leer sobre las diferentes actitudes con las que las personas se enfrentan a la muerte me hizo pensar sobre mis prioridades. Al fin y al cabo, los seres humanos no somos tan diferentes. Por fin entendí por qué mi abuela se había divorciado con 80 años, entendí que siempre hay tiempo de cambiar, de recalcular una nueva ruta que diría el GPS.

Así que espero que este post sea la señal que necesitas para que te animes a dar ese paso que llevas tiempo pensando. Sacar un hueco para dedicarle a los amigos o la familia, darle una oportunidad a ese hobbie que abandonaste hace tiempo o hacer limpieza de relaciones que no te aportan nada.

Evitar todos los arrepentimientos es una tarea casi imposible, seamos realistas, pero dedicar un ratito a cuidarte puede acercarte un poco más a ese objetivo.

Barby.