Es adentrarte en el escabroso y maravilloso mundo de la maternidad y empezar a descubrir productos que directamente no sabías ni que existían. Uno de los que más me llamó la atención desde el principio fue este tipo de papeleras de pañales que los envasan para que no huelan. ¿Pero y esta fantasía?

La marca más vendida es Tommee Tippee y además fue el que me regalaron al hacerme la lista de nacimiento en Amazon (la verdad es que es una maravilla y tiene varios beneficios y regalos, si quieres hacerte tu lista de nacimiento pincha aquí).

 

Volviendo a esta papelera supersónica. Como verás, lo que es la papelera en si misma es barata, unos 27€. El truco está en que necesitarás recambios y ahí es donde se te va el dinerito.

¿Merece la pena la papelera de Tommee Tippee?

Para mí, sí. Si os digo que lo que peor llevo de un bebé son los olores, no exagero. Y es que cuando huelen bien, es delicioso, pero cuando huelen mal… ¡llamen al Seprona!

Tengo un olfato terriblemente delicado, herencia de mi madre, y no puedo soportar el olor de pañales apilados, así que este contenedor ha sido mi salvación.

Tiene un sistema que los enrosca y evita que el olor se esparza por toda la habitación. Nosotros intentamos no dejarlos más de 1 día igualmente, pero os digo que en casos puntuales se han quedado hasta 3 días y seguía sin oler (casi nada). Huele un poco con la tapa abierta, pero con ella cerrada de lujo.

 

 

El recambio se instala fácil, y te puedo soplar que venden recambios compatibles más baratos de otras marcas (por ejemplo estos). 

Es muy compacta y casi no ocupa, está hecha de buenos materiales y esta nueva versión es ECO. Ojo, que hay quien la usa no solo para bebés sino también para evitar los olores de la arena de los gatos, ¡ideaza!

Puedes comprar aquí la papelera que viene con un recambio.

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