Siempre he tenido muy claro que si tenía una a hija no le pondría pendientes cuando naciera.

Pienso que cada una con sus hijxs lo hace lo mejor que sabe y puede y tomando las decisiones que entiende que son mejores para todas las partes. Cada una decide lo que prefiere hacer tanto con la manera de criar educar, qué ropa ponerles, qué rutinas seguir, si le pone vestido, pendientes o zapatillas y ninguna decisión nunca es mejor o peor. Creo, eso sí, que tiene que ser una decisión informada y meditada.

El principal motivo de mi decisión de no ponerle pendientes es porque no puedo soportar hacerle daño por una cuestión meramente estética.

Muchas personas tienen la creencia de que los bebés sufren menos o padecen menos dolor si le perforan las orejas a una edad bien temprana. Esto también opinaban los doctores hace menos de cien años cuando operaban a pobres bebés sin anestesia. Igual la comparación es exagerada, pero que una persona no recuerde por la inmadurez de su cerebro de recién nacida un episodio doloroso, no quiere decir que no sufra el dolor o que sea de menor intensidad.

Estamos hablando de perforar las orejas, yo, aunque me hicieron los agujeros al poco de nacer y no lo recuerdo,  sí recuerdo cuando voluntariamente me seguí haciendo algunos agujeros más de adolescente, no es un dolor que no se puede aguantar pero inocuo no es. 

No considero tampoco que tengamos que marcar a nuestras hijas para hacer una diferenciación de sexos.

Estamos diciendo a la gente, muchas veces a la gente que ni conocemos, porque al final si te conocen y tienen relación contigo van a saber que has tenido una niña sin necesidad de mandar mensajes con algún abalorio, que se trata de una bebé, que es de sexo femenino. Porque claro, ¿cómo se distinguen? Son bebés, tienen cuerpos neutros, caritas de bebé neutras, pelos cortitos neutros, y más allá de la ropa que queramos elegir, habrá que marcar a las mujeres,  como no, de una manera que ya no quepa duda de que se trata de una chica.

Me han preguntado muchísimas veces si es un niño porque no lleva pendientes, me han dicho que se los ponga para que esté más guapa, parece que si no se los pongo estoy haciendo que mi hija no esté en la onda.

Yo, en la actualidad, no gasto pendientes y no creo que pase nada, ni a nadie le sorprende y también me gusta ponerme pendientes grandes y supongo que a la gente tampoco le influye ni le sorprende. ¿Y si eres una bebé si? Hacerlo por tradición me parece que está obsoleto.

Al final, estamos decidiendo sobre el físico de nuestra hija, por algo meramente decorativo, para mostrar al mundo su diferencia respecto al otro sexo, por estar bonita, por tradición, porque no sienten dolor, porque nos da la gana. Al final son decisiones y cada una decide lo que quiere y puede.

Tanit Cano Lorente